¡No tienen vergüenza! Después de las imágenes que hemos podido ver por la televisión y, sobre todo, en Internet, maquillar el intento fallido de desalojo de la acampada de Barcelona mediante una brutal intervención policial disfrazada de operación de limpieza es bochornoso. Al igual que hacer un repaso de los reportajes periodísticos sobre las manifestaciones del viernes convocadas por el movimiento 15-M en las distintas ciudades y saltarse Málaga en todas las crónicas.
Lo que pasó el 27 de mayo en Málaga es algo que quieren ocultar a toda costa. Pero es complicado ocultar la manifestación más numerosa celebrada en esta ciudad desde el movimiento masivo contra la guerra de Iraq, con más de 20.000 participantes (posiblemente, la manifestación más numerosa de las últimas dos décadas).
Entre las consignas más coreadas fueron omnipresentes las de solidaridad con los compañerxs acampados en Barcelona. ¡SI TOCAN A UNO, NOS TOCAN A TODOS! Y todxs empezamos a gritar con fuerza “¡Todos somos Plaza Catalunya!”.
La gran participación del conjunto del Estado en el movimiento 15-M no es gratuita. La Asamblea, máximo órgano de decisión, ha discutido y aprobado los ocho puntos básicos a reivindicar por el movimiento (puedes leerlos enteros en malaga.tomalaplaza.net)
Reivindicaciones contra el paro, contra los despidos, contra regalar el dinero a los banqueros haciendo pagar la crisis a los trabajadores, contra el corrupto tinglado político que facilita todo esto a través del monopolio de las decisiones entre unos pocos a sueldo que nos mantienen explotados, divididos y con el miedo de ser despedidos en cualquier momento.
Pero ese miedo se ha roto. Hemos demostrado que nos podemos unir, que tenemos fuerza y que se puede luchar contra esta situación. Salir de la Plaza y extender la movilización y participación a los barrios y las empresas ha sido un gran logro de todxs. La simpatía y participación de lxs trabajadorxs es enorme y fundamental, incorporando la consigna de EXIGIR LA CONVOCATORIA DE UNA NUEVA HUELGA GENERAL que parta de nosotrxs, trabajadorxs, con nuestras exigencias.
Es impresentable el silencio de la dirección de los sindicatos ante el movimiento que recorre todo el Estado y parte del mundo (Málaga, Madrid, Barcelona, París, Atenas…) ¡Basta ya de Pacto Social!
No pueden seguir manteniendo que la sociedad no se moviliza. ¿Van a aceptar la debilidad que creen que tenemos para seguir pactando a la baja o se van a apoyar en la fortaleza de lxs miles de jóvenes y trabajadorxs que han salido a la calle para golpear contundentemente y convocar una huelga general?
Los ataques contra nosotrxs, los trabajadorxs, siguen encima de la mesa: negociación colectiva, copago sanitario, despidos indiscriminados como los que están sufriendo lxs trabajadorxs de Telefónica, etc. Ahora es el momento de plantarnos y fusionar la tremenda fuerza del movimiento 15-M y las reivindicaciones que hemos aprobado entre todxs, con el golpe que supone una huelga general real para terminar con los pactos que sólo nos perjudican a nosotrxs, mientras ellos siguen ganando inmensos beneficios.
Tenemos que conseguir que todos lxs afiliadxs y delegadxs sindicales que opinan como el movimiento 15-M, sean los que tengan voz en los sindicatos y juntos luchar con la firmeza suficiente para gritar a los gobiernos y los mercados nuestras exigencias legítimas y justas. Necesitamos DEMOCRACIA REAL YA en estas organizaciones.
Para ello, es fundamental mantener y aumentar la participación en las Asambleas que se realizan diariamente a las 19:00 en la Plaza de la Constitución y en las comisiones que se reúnen después.
¡Aprovechemos toda esta fuerza para cambiar el sistema político y económico para que sea en beneficio de la mayoría y no de los auténticos culpables de la crisis!
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