que reunió al final en las calles, superando todas las expectativas, a más de DOS MILLONES de personas en el centro de la capital, según algunas fuentes. 
Muchos tienen que arriesgarse y pasar un punto de control del ejército para luego entonar consignas contra el régimen exigiendo la dimisión de Hosni Mubarak.
Por ahora el ejército se comprometió a no hacer uso de la fuerza, considerando que las reivindicaciones populares son legítimas. Despliegan cantidad de banderas, carteles y pegatinas contra el tirano, con una gran afluencia de juventud, pero tambien hombres mayores, mujeres y niños.
El bloqueo de los medios de comunicación y transporte ordenados por el Gobierno continúa y ni funciona Internet ni los teléfonos móviles.
Están bloqueadas las principales arterias como la autopista entre El Cairo y Suez para evitar que acuda el pueblo que está movilizado en su inmensa mayoría.
La democracia obrera que están conquistando " a través de los piés", con estas marchas, movilizaciones y luchas será muy dura.
Pero puede ser mucho más firme que la democracia burguesa obtenida solamente "a través de las manos", cuyos votos son manipulados o comprados con dinero por los capitalistas con su aparato de propaganda.
La bolsa de valores capitalistas sigue cerrada y de hecho existe una huelga general que dura ya más de una semana con protestas y movilizaciones continuas.
La lucha heróica y pacífica del pueblo egipcio, contagiado por la triunfante lucha de la Revolución de los Jazmines que derrocó en Túnez al odiado Ben Alí sigue su curso y hasta ahora está siendo ejemplar.
Todos los pueblos del Magreb y muchos otros del mundo árabe, tanto Túnez, Egipto, Yemen, Argelia, Jordania... viven en la pobreza, oprimidos por las élites gobernantes dictatoriales que tienen una vida de lujo mediante el saqueo permanente a los trabajadores.
Esos pueblos empobrecidos y atacados han dicho: ¡¡ HASTA AQUÍ HEMOS LLEGADO, BASTA YA¡¡
El sistema capitalista está en crisis total y desde hace más de tres años el mundo se ha hundido en una profunda recesión.
La clase dominante está intentando poner todo el peso de la crisis de su sistema sobre los hombros de las capas más pobres de la sociedad.
Esa es la causa fundamental de los cambios profundos que estamos viendo en Africa y otras zonas del planeta, cuyas luchas representan las aspiraciones de las masas de buscar desesperadamente el camino de una vida mejor, de la igualdad, la libertad y la justicia; es decir del socialismo.
Esos cambios no pueden ser otra cosa que estallidos bruscos, cambios repentinos de la lucha de masas por parte de todos y cada uno de los oprimidos y explotados que muestran su descontento.
Diferentes capas de la sociedad, incluidos secciones de la pequeña burguesía, como abogados y técnicos, pero sobre todo trabajadores explotados y jóvenes parados participan en esa lucha ejemplar; sin que se produzca esa participación, la lucha de masas es imposible.
Pero, ningún cambio profundo es posible sin lucha y la confusión traerá al movimiento sus prejuicios, sus fantasías reaccionarias, sus debilidades y errores si no se llega hasta el final.
Los agentes del imperialismo están al acecho, como se está demostrando en Egipto con la infiltración de algunos elementos como El Baradei que es un claro agente del capitalismo.
Las masas no aprenden de libros sino de la acción práctica de la lucha entre las clases, en defensa de sus intereses contradictorios.
De una u otra forma, las masas están rebelándose y atacando al capital, respondiendo a los ataques que han venido sufriendo durante años y se verán ogligadas a forjar la vanguardia con conciencia de clase de la revolución o serán derrotados.
Los trabajadores más avanzados, tienen que expresar esta verdad objetiva de una lucha de masas abigarrada y discordante, variopinta y aparentemente fragmentada confluyendo hacia la unidad.
Pero serán capaces de unirla y dirigirla, tomar el poder, apoderarse del control de la Banca y los medios medios de producción claves y expropiar los monopolios para ejercer el control de los mismos, si asumen un programa correcto y una dirección firme que no les traicione.
El control de los trabajadores de los medios de producción, comunicación y cambio, para introducir otras medidas democráticas totales, van a significar el derrocamiento completo del poder de la burguesía y la victoria del socialismo.
Si no consiguen eso, la revuelta podría ser bañada en sangre por la contra-revolución, que será apoyada por el Imperialismo.
Por eso es tan importante que no permanezca nada del antiguo régimen y que quede purgada por las masas, de forma inmediata toda la escoria pequeño burguesa que ha colaborado con el Imperialismo, saqueando al pueblo con una Dictadura feroz que tiene que fenecer apartanto a todos sus componentes y colaboradores corruptos, si no quieren que el cáncer del capitalismo se reproduzca, si quedan dominando la situación algunos elementos de metástasis que reproduzcan el mal.
¡¡VIVA LA LUCHA DE LA CLASE TRABAJADORA¡¡
¡¡POR UNA FEDERACIÓN SOCIALISTA DE LOS PUEBLOS LIBRES EN EL MAGREB¡¡
ÁREA DE COMUNICACIÓN Y FORMACIÓN.
IZQUIERDA SOCIALISTA DE MÁLAGA-PSOE.
is-psoe.malaga@terra.es
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ResponderEliminar¿Y por qué no de toda África, de todo "el mundo árabe", o ambas cosas a la vez?
ResponderEliminarSé que eso es extremadamente difícil, ahí llegamos todos, creo... Pero...
Una federación socialista intercontinental pero con continuidad física, con ese tamaño (sea cual sea la opción de esas tres serían más de 1.000 millones de habitantes) que llegue al poder de forma más o menos pacífica, “saque de circulación” inmediatamente a toda la quinta columna y se ponga al momento "manos a la obra", sería la puntilla final al capitalismo y a sus defensores.
Salud.