2 de mayo de 2016

AUTOCRÍTICA, RECTIFICACIÓN Y GIRO A LA IZQUIERDA.

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Nos enfrentamos irremisiblemente a unas nuevas elecciones, donde mediante el voto democrático, los ciudadanos tendremos que enmendarle la plana a los dirigentes políticos de los Partidos del arco parlamentario, que han sido incapaces de encontrar el cauce para la formación de un Gobierno, ante cuya situación no solo debemos ser críticos, sino también autocríticos, pues se hace necesario este procedimiento para conseguir la rectificación de los errores que se hayan cometido y preparar el giro a la izquierda que los trabajadores reclaman, derrotando a las derechas.

Nuestro partido, el PSOE, como todos los demás, también hemos cometido errores, principalmente tanto por los órganos de dirección de la corriente oficialista, que más bien ha insistido en continuar con la deriva hacia la derecha, buscando primero la alianza con C’s, siendo por tanto responsables de las derrotas en su gran mayoría y la incapacidad de haber conseguido formar gobierno, al haber fracasado en primer lugar de orientar el timón primero hacia la búsqueda de un gobierno de las izquierdas en una conjunción de los trabajadores de manera resuelta.

Asimismo debemos autocriticarnos por la debilidad y deficiencias de nuestra corriente Izquierda Socialista que hemos sido todavía incapaces de fortalecernos y ganarnos la confianza de los trabajadores, la juventud y las capas menos favorecidas, para que entren en el partido a ayudar a reclamar el giro a la izquierda por el que seguimos trabajando, pese a nuestro combate en defensa de la alternativa de programa y de una táctica más clara hacia la confluencia con las luchas sociales y sindicales en las que hemos venido participando.

No todo se ha hecho mal, porque vimos muy positiva la consulta interna sobre si se apoyaba o no el Pacto PSOE/C’S, que pese a obtener el voto NO por el que I.S. venía apostando, con un apoyo de más de 21.000 votos, a requerimiento de nuestra corriente y otros grupos internos que lo rechazaba, el apoyo en torno a los 79.000 votos dijeron SI, algunos con la buena intención de que Podemos podría al menos abstenerse para cerrarle el paso el PP, pero ha sido imposible aunque respetamos la autonomía de cada fuerza política.

Los comunicados, escritos y posicionamientos de nuestra corriente Izquierda Socialista en el combate en defensa de la alternativa de izquierdas, fijando nuestra posición en contra del PP y C’s , han sido constantes en cada asamblea, coordinadora, Comisión Permanente, y redes sociales,  pero todavía hemos sido incapaces de conformar una mayoría suficiente que nos permita una nueva correlación de fuerzas que nos haga avanzar hacia un nuevo modelo de partido más democrático, situado más a la izquierda y en defensa del programa genuinamente socialista.  Pensábamos que la radicalización de las masas que se ha producido en los últimos años y sobre todo, la juventud y las capas más castigadas por la crisis, nos ayudarían en esa tarea ingresando en nuestro partido a través de nuestra corriente, pero ese movimiento hacia la izquierda de las masas se ha expresado por fuera y no dentro del PSOE.   Nuestras direcciones, tanto el Comité Federal como la Comisión Permanente de I.S. tendrán que analizar, con el concurso de las bases, mediante un debate a fondo, qué ha ocurrido para la pérdida de apoyos de los votantes.

La responsabilidad de las nuevas elecciones no debemos buscarla, por tanto, solo en Podemos, sino también analizar la parte de errores que hayamos podido cometer desde nuestra propia dirección encabezada por Pedro Sánchez. Uno de los errores tácticos más evidentes puede haber consistido en pactar previamente con la derecha de C’s de forma precipitada, cerrada y firme, frustrando la posibilidad de comprometerse con una exploración previa que pudiese avanzar hacia un gobierno de las izquierdas emergentes.

Es cierto que Pablo Iglesias (PODEMOS) tiene también parte de responsabilidad, pero ante la disyuntiva de apoyar un Gobierno PSOE/C’S, que en cierta medida podría ser visto por sus bases y votantes, (como resultó en su consulta interna) de puro continuismo sin que representase realmente un Cambio, debería haber sido previsto por Pedro Sánchez y los estrategas del Partido, lo que podría representar un entorpecimiento para el Pacto con las Izquierdas (¿o quizás esa táctica estaba premeditada y correspondía con la marcada con las llamadas “baronías”?)  por ser las más favorables y admisibles por la clase dominante y el PP que ya anunció en Europa que se iba a nuevas elecciones el 26/6, además de los restantes poderes fácticos.

Está claro que en ese caso se confirmaría la torpeza de la dirección del  PSOE, (por no utilizar otro calificativo) al confiar en la capacidad de convencer a Podemos que tuviese altura de miras y que se adhiriese o votase abstención al pacto con Rivera, cuando en la campaña previa se decía que esa fuerza naranja era la reencarnación del PP con 20 años menos, que estaba apoyada por la oligarquía económica y promocionada, financiada y amada por el IBEX-35 y los grandes Medios de Comunicación de la burguesía.

Asimismo debe quedar claro la responsabilidad de la formación C’s que no se ha cansado de decir que el pacto representa el 80 % de su programa, que a su vez quería el cambio y la regeneración ética, pero, contradictoriamente ha insistido con contundencia para que el PP se sume a la posible coalición cuando Rajoy se encuentra rodeado por una balsa pestilente de corrupción, motivo que ha provocado el total aislamiento de la fuerza reaccionaria que representa el PP. Esa contradicción de Rivera le está mermando credibilidad como han señalado las recientes encuestas.

Necesitamos que las izquierdas asumamos la autocrítica en la parte alícuota que nos corresponda y afrontemos las nuevas elecciones con valentía, limpieza, rectificación y ética, para subsanar los errores y las intransigencias, pero con el objetivo claro de derrotar a las derechas,  planteando con firmeza que esa es la única línea roja, ya que los intentos desesperados de la propaganda burguesa, asumida en algunos momentos por Pablo Iglesias que quiso negar que existiesen Derechas e Izquierdas, reclamando el eufemismo de Arriba y Abajo, ha fracasado estrepitosamente. Aunque si rectifican a tiempo y van al diálogo para conseguir el avance de Podemos con la unificación de I.U./U.P en las nuevas elecciones, podría producirse un equilibrio de las izquierdas que propiciara el fortalecimiento de escaños haciendo posible un Gobierno claro de los trabajadores.

La lucha en la campaña por la disputa del voto debería consistir en ofrecer con claridad cual es el programa socialista que cada fuerza defiende y,  a su vez,  desnudar las maniobras de la burguesía, sus mentiras, sus corrupciones, sus ataques al nivel de vida de la clase trabajadora y las capas medias, a la vez que tendríamos que comprometernos a atender las necesidades y aspiraciones de cambio que nos exigen y necesitan los millones de jóvenes y trabajadores a los que el PP nos ha robado el futuro.  Para ello es menester llamar enérgicamente a la movilización, a la reorganización, la unidad y la lucha de las izquierdas, tanto sindical como política y social, para confluir hacia un verdadero Gobierno del Cambio.

Debemos reconocer el fracaso de estos cuatro meses en la incapacidad de formar un gobierno, sobre todo los que pensaron que era posible conseguirlo en su transversalidad, pero que ha demostrado ser el síntoma claro de la profundidad de la crisis política, económica y social a la que nos enfrentamos, que corroe el modelo capitalista, que puede llevarnos, si continuase gobernando la derecha hacia una inestabilidad política, convulsiones y agitaciones sociales, al ser incapaces de resolver por el capitalismo los dos problemas graves que reclaman urgencia: La Cuestión Social y la Cuestión Territorial.

Tenemos que comprender que, aún alcanzado las izquierdas  en las próximas elecciones unos resultados favorables expresados en las urnas para que la aritmética parlamentaria permita formar un gobierno fuerte de Cambio, no podremos impedir que las derechas exijan, chantajeen e intenten imponer, a través de los apoyos de la  Troika y sus amos, más recortes, austeridad y ataques a los intereses de los más desfavorecidos. Para derrotar a la clase dominante vamos a necesitar una alianza firme con los sindicatos y demás izquierdas que luchan, con movilizaciones masivas del pueblo en acción, que haga posible colocar a la reacción derechista contra las cuerdas y abrir el camino para poner la economía al servicio de la sociedad de forma planificada y armónica, mediante la aplicación de la verdadera democracia, una democracia social abierta y avanzada para controlar la corrupción y los despilfarros  que nos permita avanzar hacia el genuino socialismo para transformar la sociedad y garantizar a cada persona el derecho al Trabajo, a un Techo, a Sanidad, Educación, Pensiones y apoyo a la Ley de Dependencia, que permita a cada ser humano una vida digna. La lucha por el socialismo ya no es una utopía sino que se ha convertido en una necesidad para la Humanidad.

COORDINADORA PROVINCIAL.
IZQUIERDA SOCIALISTA DE MÁLAGA-PSOE.A

NOTA: Cualquier comentario o crítica escribir a:
ispsoeandalucia.malaga@gmail.com






2 comentarios:

  1. PODEMOS debe ser el mecanismo de la unión de la Izquierda y IS debería estar ahí.

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  2. PODEMOS debe ser el mecanismo de la unión de la Izquierda y IS debería estar ahí.

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