El Presidente Rajoy en su discurso de balance de su gestión política, pronunciado en rueda de prensa el pasado 30 de diciembre, presume de su política de ataques contra los trabajadores, contándonos sus mentiras como si viviésemos en el “país de las maravillas”, con un menosprecio insultante hacia la clase trabajadora y los pobres. Con este artículo crítico analizamos la situación a la que nos ha llevado esa brutal ofensiva antisocial del Gobierno de Rajoy, desde un punto de vista distinto.
Rajoy oculta que la economía está dominada por la clase burguesa que ha
amasado una enorme riqueza y poder antes y durante la crisis estructural del
sistema capitalista que se inició hace ya más de nueve años. Han venido utilizando su poder e incluso los
recursos del Estado, para saquear al pueblo trabajador, robándoles a los pobres
para dárselo a sus ricos banqueros y poderosos de la corrupción.
Rajoy oculta que a lo largo y ancho de todo el país la clase trabajadora
y los sectores menos favorecidos están cada vez más indignados por la política
de austeridad y recortes que lleva a cabo el Gobierno reaccionario del PP,
sostenido por una pandilla que han aprovechado sus tramas corruptas para
financiar sus campañas electorales, jugando con ventaja, por lo cual este gobierno no tiene la
suficiente legitimidad democrática que ellos mismos se otorgan, con sus
permanentes declaraciones, con las que
nos quieren hacer creer que ignoraban lo que ha estado pasando mientras se
revolcaban en la pocilga en la que han venido chapoteando con tanta podredumbre
en connivencia entre tramas de empresarios corruptores y políticos corruptos.
Rajoy oculta que la
caterva de bandidos compuesta por grandes empresarios que con sus sobornos y
mordidas han tenido comprados y a su servicio a esas tramas de “politicastros
mercenarios”, esos saqueadores auxiliados por banqueros cómplices que han
desvalijado con poca vergüenza las arcas de la banca de los depósitos de
millones de personas honradas que mantenían sus cuentas corrientes con un
dinero fruto de su trabajo y esfuerzo cotidiano, están asqueados de esa
política burguesa, y tienen toda la razón, porque han estado robando a los sectores menos
favorecidos para beneficio de los poderosos y ricachones, sin que el Presidente
y su Gobierno se den por aludidos, ni asuman responsabilidades políticas por
esas colosales estafas. Esa nauseabunda situación se expresa por el rechazo de
los votantes a todos los partidos, con
los más de 11 millones de personas que no se acercan a las urnas cuando son
llamados a elecciones, lo que permite que el PP gobierne con un escaso 21,6 % %
del censo total de 36.518.100 votantes del 26-J, de los cuales 1.920.256
residentes en el extranjero no pudieron votar en una abrumadora mayoría por
trabas administrativas del Gobierno PP.
Rajoy oculta lo que ha
venido haciendo su Gobierno cuando favorecía a sus empresas afines con
exenciones fiscales premiando a los evasores más ricos con amnistías fiscales,
mientras que la pobreza y el paro se extienden como una mancha de aceite y
hemos visto cómo cada vez mayor número de pobres duermen en las calles o sufren
cortes de luz, o niños que están malnutridos castigados por la pobreza sin que
el Estado acuda a su rescate, mientras
por otra parte el Gobierno se dispone a gastar cinco o seis mil millones más en
salvar a las multinacionales que se han lucrado con la construcción de las autopistas
quebradas para cobrar otra vez más del Estado. Esas inversiones están más que
amortizadas, dado que el costo de cada
kilómetro de autopista ha salido el
doble de lo que les cuesta a los alemanes, por ejemplo.
Rajoy nos miente cuando
habla de que la economía española es la locomotora de Europa, que todo marcha
viento en popa, pero a su vez dice que no hay dinero para rescatar a los
pobres, pero siempre tienen de sobra para rescatar a banqueros mafiosos y
capitalistas ladrones y constructores corruptos. También invierten ingentes
sumas de dinero en presupuestos para armas y extender ejércitos mercenarios por
todo el planeta, que perpetúan las guerras fuera de nuestras fronteras con exterminio de
seres inocentes como ha pasado en
Afganistán, Iraq, Siria y en otros frentes bélicos. Para esas matanzas
siempre hay recursos presupuestarios.
Rajoy oculta la
realidad social, pero tenemos que hablar también de los problemas “sociales”
que sufre el pueblo trabajador y no solo de los “económicos” que benefician a
los capitalistas, aunque los empresarios
que dominan los grandes medios de comunicación quieren callarnos y no publican estos
análisis más críticos porque se deben a
los potentes intereses de la clase dominante. Pero nuestro deber como
socialistas es dar argumentos en estos debates y defender los intereses de la
clase trabajadora a la que nos debemos, llamando a la lucha para restablecer la
esperanza que nos están quitando, explicando que la lucha es más necesaria
ahora que nunca.
Rajoy mienta y nos
ataca pero tenemos que luchar para que los parados tengan trabajo, para que
cada familia disfrute de una vivienda digna, para que no haya nadie que pase
hambre o no pueda cubrir sus necesidades básicas con unos ingresos
garantizados, para lo cual, la lucha firme para que todos dispongamos de una
Renta Básica de supervivencia tiene que fortalecerse como una de las
reivindicaciones irrenunciables y eso no es solo tarea de los políticos
profesionales, sino que nuestros derechos, la democracia y el socialismo los tenemos que
defender entre todas y todos.
Rajoy oculta los
efectos de su reforma laboral como la facilidad de despido, contratos basura,
precariedad, o las jornadas que realizan los trabajadores en la actualidad, que
se compone de más horas extras que nunca, careciendo en su inmensa mayoría de
las vacaciones debido a sus trabajos precarios y eventuales, con contratos
sucesivos que se liquidan con los descansos pagados y a veces ni eso. La
burguesía se extraña de que haya tanta gente estresada, de mal humor, violenta
e incluso que aumenten los infartos y la accidentalidad laboral. Las jornadas
extenuantes y prolongadas enferman al asalariado. Entonces tenemos que hablar
también del deterioro de la asistencia social, la sanidad, la dependencia y
otros recortes, como en la investigación sanitaria y científica, porque la demanda
de servicios crece y los presupuestos disminuyen cada año.
Rajoy oculta y parece
ignorar la desigualdad entre ricos y pobres que no para de crecer. Crece
también el número de millonarios por arriba y el de pobres por abajo. Cuando se
menciona el crecimiento de la economía por parte de Rajoy y su gobierno, la
gente más pobre, los asalariados y las capas medias castigadas por la crisis se
preguntan que quienes son los que se están aprovechando entonces del fruto de
ese enorme esfuerzo laboral que hace el
pueblo. Los banqueros y las grandes multinacionales se están llevando la parte
más grande de la tarta, que saquean las arcas del Estado y se siguen apropiando
de la parte más grande de los beneficios, atesorándolos en Paraísos Fiscales,
pero no invierten en creación de puestos de trabajo.
Rajoy oculta y no se
atreve a mostrar la desigualdad y la pobreza que es de escándalo, producida por su política de recortes y
austeridad que dejan en el paro a cerca de 2 millones de jóvenes que han tenido
que emigrar para buscarse la vida fuera. La pobreza alcanza ya a 13,3 millones
en riesgo de exclusión social. La pobreza infantil crece ya al 27 % de niñas y
niños de nuestro país y más de 3 millones y medio sufren pobreza severa. Son ya
más de 50.000 personas las que no tienen un techo para cobijarse y muchos
duermen en la calle. El número de parados lleva tiempo en torno a los 4
millones y los contratos temporales llegan al 92,1 % y de ellos el 35,57 % son
a un tiempo de corta duración, por días e incluso por horas. Rajoy ha fabricado
una nueva situación de los llamados trabajadores y pobres, que están en torno
al 15,8 % que cobran unos salarios de miseria, incluso por debajo del salario
mínimo interprofesional.
Rajoy juega con una
baraja trucada y saca cuatro ases para mostrar una realidad ilusoria y feliz,
para los poderosos, pero esos datos anteriores demuestran el grado de
desigualdad que han provocado las políticas antisociales del Gobierno del PP,
por lo que la clase trabajadora debemos reorganizarnos para la batalla diciendo
NO es NO a las Derechas que quieren continuar la ofensiva contra las
izquierdas, por lo que el año 2017 tiene que ser el de las movilizaciones y
pasar a la acción, pues la situación dramática en la que nos han dejado lo
exige, lo cual está provocando un debate profundo entre las diferentes
organizaciones de las izquierdas, de las diversas corrientes internas, tanto en
el PSOE con la controversia creada entre la Gestora y la militancia, los de Podemos,
con la disputa entre “pablistas” y “errejonistas” y también en los sindicatos, donde están surgiendo
corrientes que exigen el final de la política de pactos y conchaveos con la
patronal y pasar a la acción reivindicativa sostenida y de masas. Nosotros como
corriente Izquierda Socialista continuamos defendiendo con fuerzas ese giro a
la izquierda por el que venimos luchando, buscando la confluencia y unidad en
la acción con las fuerzas afines de las izquierdas, con los partidos, los
sindicatos y organizaciones sociales de los trabajadores.
Para concluir Izquierda
Socialista trabaja por ofrece soluciones a los problemas de la clase
trabajadora que debe pasar por el ejercicio activo en defensa de los derechos
sociales, en la lucha cotidiana, porque
nunca vendrán de la mano de quienes nos explotan y de aquellos que les ayudan a
mantener esa explotación y la precariedad de nuestra clase asalariada que somos
la mayoría en esta sociedad. Nuestra
tarea como trabajadores y como socialistas es reorganizarnos mejor para
contribuir entre todas y todos, mediante
un debate claro de ideas y programas, al rearme ideológico del Partido que nos
permita avanzar hacia la Unidad y la lucha que promueva los cambios sociales que
los pueblos reclaman, porque otro mundo no solo es posible, sino que es más
necesario que nunca. Para los trabajadores, nuestros aliados nunca pueden ser
los burgueses, sino los trabajadores y oprimidos del resto del planeta. Somos
socialistas e Internacionalistas y la lucha por los Derechos Sociales y
Democráticos es una sola, con el
objetivo de conquistar un “Estado Socialista y Federal” (*) en cuyo programa, que estamos debatiendo y elaborando, te invitamos a participar.
José Martín Rodriguez.
Área de Comunicación.
IZQUIERDA SOCIALISTA DE
MÁLAGA-PSOE. A
(*) La persona que quiera recibir gratuitamente
ese documento a debate, puede pedirlo al correo de abajo si todavía no lo
conoce, poniendo en asunto las palabras: “Por un Estado Socialista y Federal”.
ispsoeandalucia.malaga@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario