El PP ha iniciado su plan de ataque a la ciudadanía, con el objetivo de hacer pagar al pueblo el déficit acumulado, que representa los beneficios de los banqueros y especuladores que se lo han llevado calentito durante los años del auge,
y nos harán pagar, con sangre sudor y lágrimas, a los trabajadores, si no lo evitamos, porque Europa ha entrado en un régimen de austeridad, como consecuencia del golpe de Estado Financiero ejecutado a escala mundial.
Sus objetivos son poner en marcha medidas drásticas, metiendo la mano en los bolsillos de los trabajadores para seguir llenando las arcas de los banqueros y multinacionales, y así que aumenten los beneficios de los especuladores bursátiles, para “calmar a los mercados” como llaman “eufemísticamente” a las ansias de beneficios de los especuladores y ladrones, arrasando con todas las conquistas sociales arrancadas mediante la lucha por la clase trabajadora en los últimos 35 años.
La vicepresidenta Sáenz de Santamaría ha explicado que esto es solo el inicio y que tendrán que poner en marcha más planes de rigor, ante la situación “excepcional e inesperada” que obligan a “adoptar medidas extraordinarias y no deseadas” que “no tenía previsto aprobar”. La receta consiste en un histórico recorte del gasto de 8.900 millones y una subida temporal de impuestos con la que lograr un aumento de ingresos de 6.250 millones.
Una de esas medidas consiste en un recargo “temporal de solidaridad” progresivo y durante dos años, sobre las rentas del trabajo y del capital, pero con la salvedad que las rentas del trabajo pagan en torno a un 300 % más que las del capital, dejando claro desde el principio a qué clase sirve el Gobierno del PP. De cada 3 euros, 2 saldrán de las rentas del trabajo y se aplicará ya en la nómina de Febrero. Ataca a los más débiles suprimiendo los 210 euros de ayuda al alquiler de viviendas. Congela el salario mínimo en 641,40 Euros, el segundo más bajo de Europa después de Portugal. Congela los sueldos de los empleados públicos y aumenta la jornada laboral. Suspende las oposiciones a la Administración Pública con pequeñas excepciones. El tijeretazo es brutal, atacando también a subvenciones con recortes del 20 % y lo más inhumano e increíble, como es negarle ayuda a los enfermos que necesitan protección quedando en suspenso la Ley de Dependencia.
Existe una grave acusación de falsificación de las cuentas públicas, al declarar el nuevo Gobierno que el déficit que se han encontrado, en vez del 6 % es del 8 %, lo cual tendrán que aclarar entre el Gobierno Saliente y el Entrante. El PP ha entrado como un elefante en una cacharrería y actuando como toda la derecha en Grecia, Italia, Portugal…, donde el déficit público es también del 8,3 % en 2011, que es muy similar al del Estado español y solo saben atacar a los más débiles, pero cuando la economía entra en recesión, como ha ocurrido ya aquí, las políticas de recortes sociales, aceleran el hundimiento de la demanda interior que no hará más que agravar la recesión con el peligro de adentrarse en una depresión de consecuencias incalculables. Las previsiones de crecimiento para Europa para 2012 están entre el 0,5 y el 1,8 % del PIB.
La Comisión Europea presiona para acelerar la puesta en marcha de un plan de ataque para generalizar las jubilaciones a la edad de 67 años con carácter inmediato, mientras que por otra parte, el paro juvenil sigue aumentando. En los próximos meses, la recesión se tragará los ahorros de esas medidas de ataques reduciendo las recetas fiscales a cenizas, lo cual agravará el nivel de endeudamiento. Las tasas de intereses que tienen que pagar los Estados se incrementarán agravando aún más la situación, cerrando aún más el círculo agobiante de la falta de creación de puestos de trabajo, porque solamente fomentando la producción, es decir, produciendo más y repartiendo con más justicia el fruto del trabajo, será posible salir de la crisis, pero esa es la contradicción que en términos capitalistas no se pueden saltar, porque el sistema tiene como función sacar beneficios a corto plazo, para la banca y la especulación.
El Banco Central Europeo no dispone de recursos suficientes para poder dar los créditos que el sistema demanda; la única forma que tendría de financiar a todos es mediante la creación de la emisión de bonos que es papel fiduciario, lo que aumentaría el déficit global de Europa, acelerando la bancarrota. Una suspensión de pagos de cualquier país, en el período de recesión en el que hemos entrado, arrastraría a todos los demás y aceleraría la depresión a escala mundial.
El riesgo de contagio de una de esas quiebras es considerado como muy peligroso para el conjunto de Europa, pues solamente hay que pensar en las consecuencias de una depresión duradera, con paro masivo, agitaciones sociales, huelgas generales, manifestaciones de protestas constantes, caídas fulminantes de las bolsas, pánico general y estallidos de sectores completos de la economía con cierres generalizados de empresas, etc… según algunos analistas, la quiebra de un país como Italia, Portugal o España, marcaría el fin de la Europa del Euro, que saltaría hecha añicos como inviable la Europa de los Mercaderes.
Según nos cuentas los “tecnócratas políticos” del PP, las finanzas públicas que se han encontrado están en una situación más difícil de lo que ellos creían; se dedican ahora a lanzar una campaña de preparación psicológica de la población, para ver cómo consiguen que se asimile las medidas de austeridad cada vez más severas que se avecinan. La tasa de paro que está en torno al 22 % se podría disparar para final de año, perdiéndose entre 300.000 y 500.000 puestos de trabajo más. ¿Alguien cree que se puede salir del agujero negro caminando hacia los 6 millones de parados? ¿Es con más paro como quieren conseguir la recuperación y salir de la crisis?
El peso económico del Estado español coloca a esta economía fuera de poder realizar un verdadero “plan de salvamento” por parte de Europa, en caso de quiebra estatal. Como en el resto de países europeos, la clase capitalista española, empuja la sociedad hacia el subdesarrollo de nuevo, debido a su voracidad sin límites y a su parasitismo ancestral. Pero la paciencia de la clase trabajadora y de la juventud, que ve cómo le roban su futuro, si tiene un límite.
Las masas empezaron a tomar conciencia clara, en un proceso de aceleramiento vertiginoso a partir del 15-M, que traspasó fronteras contagiándose de las luchas del Norte de África y extendiéndolas por todo el planeta, hasta el mismo corazón de Wall Street y aunque no podemos decir que en Europa haya todavía un proceso revolucionario, esas ideas empiezan ya a prender en la conciencia de muchos jóvenes y trabajadores que no tienen nada que perder, porque ya lo han perdido todo, incluso la confianza en este sistema capitalista que les niega lo fundamental, como es un puesto de trabajo digno y bien remunerado, que es la aspiración lógica de todo asalariado.
Si la derecha europea continúa con sus ataques, que bajo el modelo liberal burgués son inevitables, no podrán dar una salida justa a la cuestión social y esas son las premisas de la necesidad de la búsqueda por parte de las masas de un cambio profundo del modelo capitalista que está completamente obsoleto, agotado e inviable a largo plazo y que los trabajadores avanzarán en su conciencia, unidad y organización para dotarse de una dirección que esté a la altura de las circunstancias para terminar de una vez con el capitalismo y abrir el camino para la construcción del verdadero socialismo.
Por ello, es imprescindible nacionalizar la banca, los latifundios y los monopolios, para poder poner los recursos económicos y las palancas fundamentales de la economía en manos de los propios trabajadores, para planificar la economía, poner a todos a trabajar, y repartir con justicia el fruto del trabajo, como la forma más rápida de salir de este pozo sin fondo que representa la recesión capitalista, porque bajo el capitalismo no podemos esperar ningún futuro para la Humanidad, pero para alcanzar los objetivos que los trabajadores merecemos, debemos entender aquella frase que dice “la emancipación de la clase trabajadora será obra de la propia clase, o no será”, por lo que hacemos un llamamiento para que este nuevo año 2012 sea un año de lucha fructífero para la Reorganización y Unificación de la izquierda, para lo cual las direcciones de CCOO y UGT tienen que romper el Pacto Social tácito y negarse a firmar las contra-reformas que le proponen, y dedicarse a hacer un sindicalismo de lucha, unitario y firme contra los ataques, llamando a la unidad sindical y política del movimiento obrero. Divididos nos ganan, pero Juntos y Organizados, la clase trabajadora será invencible. La lucha continúa…. Organízate y lucha, porque otro mundo es posible pero con el verdadero socialismo.
ÁREA DE COMUNICACIÓN Y FORMACIÓN.
IZQUIERDA SOCIALISTA DE MÁLAGA-PSOE.A
Is-psoe.malaga@terra.es
2 de enero de 2012
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