“Capitalismo
significa Guerra”, sentenció un gran dirigente socialista marxista hace más de
cien años. Pablo Iglesias Posse, fundador del PSOE y UGT que hablaba así sobre
la cuestión bélica, diciendo: “”¿Qué es la guerra? Volvemos a repetir. UN CRIMEN DE LESA HUMANIDAD.
Si, un crimen, que todos, absolutamente todos, y especialmente nosotros
los obreros, pues somos sus principales víctimas, debemos combatir””.
En
tiempos de paz relativa, la clase trabajadora y la juventud somos una fuente de
mano de obra barata para los capitalistas, que nos explotan y amasan inmensas
fortunas.
En
tiempos de guerra, la clase trabajadora es carne de cañón ya que las guerras
que provocan los ricos y que los trabajadores y los más pobres sufrimos sin
haberla declarado, nos obligan a luchar pero NO para defender nuestros
intereses de clase, sino para defender el poder y los privilegios de los
explotadores y mafias del capital, es decir, las multinacionales, los banqueros
y grandes capitalistas.
En
los últimos años, después de la II Guerra Mundial, ha habido más de 200 guerras
locales (una media permanente de entre 35 40),
causando una matanza horrible, en esas guerras de rapiña como del Trio
de las Azores, donde Aznar y sus socios engañaron a todo el mundo, pero también
el fracaso de Afganistán, Irak, Siria, Yemen, Libia, Palestina, Sáhara, etc…
Se
ha seguido acelerando la carrera de armamentos más que en todo el resto de la
historia humana y bajo la actual crisis económica/pandémica, la producción
militar con las guerras y las Industrias Farmacéuticas con el saqueo a los
Estados por las vacunas son en realidad los únicos sectores industriales que
crecen desaforadamente y acumulan enormes beneficios.
La
carrera de armamentos, liderada por el Complejo Militar Industrial de EEUU,
abarca las armas convencionales, químicas, misiles, antimisiles y el arsenal
atómico con unas 16.000 cabezas nucleares, que podrían destruir el planeta
arrasando la vida de personas, animales y plantas.
Está
claro que debido a las enormes e insalvables contradicciones entre los ricos
países imperialistas, enfrentados y polarizados entre los dos bloques más
potentes, como son EEUU/Europa y Rusia/China, con esa burocracia que las
dirigen, existe de nuevo el peligro de una nueva guerra mundial, cuyos efectos
serían terribles.
Esperemos
que este riesgo que corremos toda la humanidad, amenazados por esos elementos
avariciosos y ávidos de poder, como son la OTAN y Rusia, enfrentadas por la
disputa de Ucrania, no cumplan sus
amenazas atómicas, porque una guerra de esas características podría tener un
resultado nefasto para la humanidad.
Por
ahora no se atreverán porque además, eso no sería posible más que después de
una larga cadena de derrotas impresionantes de la clase trabajadora
mundial, en las batallas de luchas
sociales que tendrán que llevarse a cabo en los próximos años de recesión al
que nos tendríamos que enfrentar, dado que la economía mundial está siendo
afectada por estos episodios bélicos.
El
socialismo científico explica que ahora, debido al enorme avance de la ciencia
y las nuevas tecnologías y a la riqueza mundial acumulada, sería perfectamente
posible acabar con la miseria, el hambre, la inseguridad y demás desastres que
afectan a la humanidad.
No
obstante, con la lógica infernal y en base a la permanencia del sistema
capitalista, crece a cada paso más abundancia para unos pocos con riquezas
colosales acumuladas en Paraísos Fiscales, mientras la brecha de la desigualdad
crece de forma obscena con más paro, miseria, desesperación e inseguridad para
la aplastante mayoría de la población mundial que huyen despavorido por las
guerras, la miseria y el hambre.
Precisamente
las carrera armamentística se acelera debido a las contradicciones internas del
modelo capitalista, que se agudizan en épocas de crisis como la actual y la
lucha de las superpotencias por la hegemonía mundial en ese bloque de
EEUU/Europa por un lado y Rusia/China por otro, con sus respectivos satélites,
cuyos sistemas competitivos han chocado, debido a la globalización y la lucha
por los mercados, que desencadenan crisis cada vez más violentas y profundas.
Solamente
EEUU tiene un presupuesto militar para este año de 680.000 millones de dólares.
Por otro lado millones de personas viven por debajo de la línea de
supervivencia y algunos expertos calculan que podrán morir de hambre y las
guerras millones de personas, hombres, mujeres y niños. “Según informe de F.A.O. se estima que en 2020
padecieron hambre en el mundo entre 720 y 811 millones de personas…” En 2021 el
húmero de hambrientos creció en 111 millones con relación al año anterior.
Existen estudios de economistas que aseguran que solamente con el 2 % del dinero que se gastan esos gánsteres de la guerra en armamento, podría acabarse con el hambre en el mundo.
Pero
ahora bien, la lucha por la Paz y el Desarme no puede entenderse aisladamente
en que acabemos con este sistema capitalista, corrupto, caduco e injusto, que
sirve solo a los ricos, enfrentándose a estos terribles escenarios de guerras.
Para
acabar con el peligro de las guerras, debemos entender que solamente
desaparecerá en la medida en que la clase trabajadora, debemos estar unidos en
base Internacionalista y luchando organizadamente por acabar con este sistema pera
construir una nueva sociedad basada en el Socialismo Científico y la Democracia
Participativa y Ética, poniendo los recursos financieros y demás ramas
principales de la economía, al servicio de la ciudadanía.
Debemos
apoyar con campañas permanentes, la destrucción de todas las armas nucleares,
tanto de un bloque como de otro, pero con eso solo no será suficiente, sino que
tendremos que vincular esas luchas sociales, bien organizadas y unidos por un
programa básico que represente la exigencia de la PAZ y el DESARME para poder
cambiar democráticamente la actual sociedad capitalista.
Hemos
visto miles de reuniones de la burocracia que dice representarnos en la ONU y
demás organismos mundiales pero que en realidad representan solo y exclusivamente
a los intereses del Imperialismo Burgués que ha fracasado rotundamente, porque su diplomacia no ha servido para
reducir ni un ápice la capacidad destructiva que siguen acumulando los
ejércitos e incluso en su ceguera con las guerras, se disponen a fomentar todavía
más las armas a costa del Estado, que la cargará via impuesto al pueblo
trabajador.
Además,
todos los acuerdos a los que han llegado, o han sido violados o son meramente
cosméticos, tratando solo temas fundamentales a favor de las finanzas capitalistas
y además siguen sin cumplir las propuestas que dicen favorecer a los más
necesitados, lo que demuestra una vez más, el fracaso estrepitoso del
capitalismo.
En
los años 70, la juventud y la clase trabajadoras luchamos en aquellas enormes
manifestaciones con el lema ¡¡OTAN NO, BASES FURA¡¡ y debemos retomar aquellos
métodos e ideales socialistas de lucha firme contra la guerra y la explotación.
Debemos
rechazar los eslóganes perversos de la burguesía, que les gusta utilizar ideas
de carácter retrógrado y perverso como eso de “si quieres la paz, prepárate
para la guerra”, pero es escaso que esos ricachones mueran en la guerra, solo
mandan a los pobres para que mueran a costa del beneficio de los ricos.
La
izquierda debemos oponernos con todas nuestras fuerzas a esas ideas
reaccionarias, contraponiendo otra más razonable y humana, como “Si quieres la
PAZ, luchemos por el Socialismo”.
La
burguesía con sus disputas y sus guerras intentan “enajenar mentalmente” a las
masas trabajadoras con esos argumentos en pro del apoliticismo, la indiferencia
o el cabreo, que apartan a la clase trabajadora de la política y ejercen la
abstención, que favorece a las derechas.
Son
argumentos nefastos para la democracia burguesa, que encima sabemos esconde
bajo su amable careta la dictadura de los capitales, por lo que todo trabajador
que entienda bien estas cuestiones y que quiera acabar con los bloques
militares, para exigir la PAZ Y EL DESARMA, de forma duradera, debemos
activarnos y reorganizarnos en líneas de clase, apoyando un programa que
ofrezca satisfacer las necesidades sociales para poder llevar a la Humanidad
por la vía del progreso, el desarrollo y el bienestar.
Dejamos
seguidamente un extracto de seis párrafos del documento recientemente aprobado
(*) donde reflejamos nuestras posiciones como parte de la alternativa a estas
delicadas cuestiones:
“”/…/
Para frenar la carrera bélica es indudable que serán precisos los
cambios constitucionales pertinentes para avanzar hacia el Estado Federado con
una visión amplia de integrarnos en la futura Federación Socialista de Europa
de la que tendremos que formar parte para avanzar en el futuro hacia una
Confederación Socialista Mundial de los pueblos libres, que es el único modelo que puede poner freno
a las guerras y la carrera armamentística que han desatado nuevamente las
potencias imperialistas en su batalla por la hegemonía mundial.
“”La ciudadanía en su conjunto debemos implicarnos más en la
lucha contra ese tipo de burocracia que se lucra con la corrupción y las
mordidas. Una lucha firme y masiva
serían los primeros pasos para luchar contra la degeneración, los malos
hábitos, la burocratización y la corrupción que deben ser eliminados en una
sociedad socialista.
“”Por
lo tanto, la democracia participativa constante y la libertad de elección son
irrenunciables y deben ser exigidas desde las bases en todas las instancias,
limpiando las Cloacas del Estado, contaminadas por las reminiscencias del
antiguo régimen que es urgente superar antes de que sea tarde, pues la reacción
nazi-fascista acecha con las garras afiladas.
“”Socialismo,
Democracia e Internacionalismo deben marchar unidos o degeneran, como hemos
visto en la Historia. Además, como la globalización del sistema se ha encargado
de demostrarnos cada día, el Socialismo tiene que ser Internacionalista o no
será posible.
“”Por
lo tanto, en política exterior la tarea principal será luchar por la Unión
Federal y Socialista de los Pueblos de Europa, como un primer paso para la
Confederación Socialista Mundial, que en un plano de igualdad, democracia,
colaboración y apoyo mutuo entre todos los pueblos del planeta, iniciemos la
andadura con el objetivo final de
eliminar las guerras y los enfrentamientos entre naciones que están
abocando a la humanidad hacia nuevas barbaries.
“”La
Humanidad se merece y debe luchar por un Gobierno Socialista para la Paz de los
Pueblos Libres. Condenamos las guerras y el terrorismo, tanto individual como
de Estado. Defendemos el Derecho de los pueblos a la legítima autodeterminación
por métodos pacíficos pero decimos no a los sectarismos separatistas,
planteando como alternativa la unión voluntaria de todos los pueblos del estado
en una Federación Socialista de Nacionalidades y Pueblos Libres””.
COMISIÓN PERMANENTE.
IZQUIERDA SOCIALISTA MALAGA.
PSOE DE ANDALUCIA.
(*) Si todavía no conoces
el documento mencionado que contiene nuestras propuestas en defensa del
Socialismo Científico, puedes solicitarlo gratuitamente al correo de abajo,
poniendo en asunto: “Documento
I.S””. ispsoeandalucia.malaga@gmail.com
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