31 de mayo de 2017

EL PASADO PSOE Y EL CAMINO DEL FUTURO.


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Ha quedado demostrado que la militancia del PSOE no estaba dividida entre ella, lo que estaba dividida era la vieja guardia con la militancia por distinta ideología.

Más del 50% de la militancia estaba en contra de sus líderes que se habían elegido entre ellos unos a otros en congresos donde se auto representaban, y otros muchos se habían dado de baja por no compartir la política de derechas llevadas a cabo por el PSOE. Se estaba convirtiendo en un partido mecánico sin militancia.

La unidad del PSOE se tiene que basar en tener la misma mentalidad como si todos fuéramos uno, sin grandes discrepancia ideológicas, pero siempre reflexionando en lo que hay que hacer y como hacerlo. Los directivos tienen que estar sometidos a la voluntad de la militancia y consultar con ella cuando sea necesario como la única soberana, esto es lo que hace la unidad y ganar elecciones. Con menos democracia interna no se puede competir con otros partidos.

Entre la derecha y la izquierda no hay un intermedio como algunos nos quieren hacer creer. Si un gobierno como el que tenemos quiere acabar con protección social y el estado de bienestar como es la enseñanza pública, sanidad, pensiones, ley de dependencia, subsidio de desempleo, etc., y si otro gobierno que dice proteger todos estos servicios, pero como es moderado, económicamente gobierna para beneficio del gran capitalismo y deja sin recursos económicos a todos o gran parte de estos servicios hasta que no sean viables, ¿Cuál gobierno de los dos es más de izquierdas? Si la economía se deja en manos del gran capitalismo y a los demás se les dan derechos sin recursos es peor que si no se les diera nada, el engaño es más grande. Si llaman radicales de izquierda a los que definen todos estos servicios se deben de sentir orgullosos ya que están cumpliendo con su responsabilidad y deber.

La diferencia que hay entre ser de izquierdas y ser de derechas se basa en estar del lado de los más débiles, agredidos y oprimidos o del lado de los más fuertes, agresores y opresores. La verdadera libertad se basa en librarse de estas últimas actuaciones.

En Podemos también hay grandes discrepancias que se podrían describir como de distinta ideología, estaban los partidarios por un lado de pactar con Ciudadanos y por otro los de pactar con Izquierda Unida, esta división se resolvió sabiamente dejando que las bases decidieran, lo cual a cada uno lo han puesto en el lugar que le corresponde, esto es lo que se llama unir al partido.

Ocupar el lugar de la izquierda se debe de hacer políticamente, no contra Podemos, hay que tener en cuenta que tanto los militantes que con su voto han apoyado a Pedro Sánchez como los que han apoyado a Patxi López son partidarios de negociar con Podemos y los demás partidos de izquierda.

Haciendo la política de izquierdas que hace Unidos Podemos el PSOE sale reforzado debido a que tiene una infraestructura muy superior, tiene militantes en todos los municipios, al menos algún representante público en casi todos, una gran red de alcaldías, casas del pueblo, etc. Si se les deja para ellos exclusivamente el lugar de la izquierda solamente si esto ocurre pueden superar al PSOE y afianzarse como el verdadero partido.

Tal como piensa la mayor parte de la militancia, a Podemos no lo hay que considerar como enemigo sino como un competidor, como en el deporte, aun que compiten unos con otros a quién mejor lo hace no dejan de ser amigos. Hacer lo contrario es dividir la izquierda para beneficio de la derecha.

Pero ya no es como antes donde los principales competidores estaban por la derecha, ahora es por la izquierda y esto implica que hay que tener los mejores representantes posible, desde el Parlamento hasta el más pequeño municipio, hay que elegir los mejores, pero hay un problema que son las listas paritarias, en lugares donde la gran mayoría de los militantes son hombres y hay un número muy reducido de mujeres, o al revés, militantes con gran capacidad tendrían que ser sustituidos por militantes de mucha menos capacidad que incluso ni siquiera desean tener cargos públicos ni orgánicos.

Lo más lógico y fructifico sería que las listas parietarias se hicieran basadas en el porcentaje de militantes de varones y hembras en cada lugar.
Hay que tener en cuenta que a la derecha no se le gana por la derecha sino por la izquierda, hay muchos votantes que les da igual una marca que otra, simplemente votan a quién les parece que lo va hacer mejor, unas veces votan a partidos de derecha y otras a partidos de izquierda, para conseguir estos votos, “los lobos se visten con piel de oveja para engañar al votante”.

ESCRITO POR HILARIO BLANCO GÓMEZ.
Miembro de Izquierda Socialista de Galicia-PSOE.


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