En un reciente artículo publicado en su blog, el compañero José Antonio Pérez Tapias, Coordinador de Andalucía de nuestra corriente Izquierda Socialista-PSOE y Parlamentario por Granada, planteaba la correcta conclusión final resumida en que, a su entender, para resolver el dilema planteado sobre si el Secretario General del
Partido, Rodriguez Zapatero, se va o se queda, "el punto crucial" está, entre otras cuestiones, en "salir de planteamientos presidencialistas”.
Efectivamente, en nuestro último documento aprobado por la Coordinadora de Málaga y presentado al último Comité Provincial, titulado: “FALTA DEBATE, AUTOCRÍTICA Y RECTIFICACIÓN”,(*) también analizamos las cuestiones internas y los dilemas a los que se enfrenta el partido por los errores cometidos, entre otras cosas decíamos “(…) por lo que es urgente preparar un giro a la izquierda que profundice en el avance hacia el verdadero socialismo o les estaremos allanando el camino a la derecha del PP. Tenemos un grave dilema: O presentamos un programa de izquierdas que ilusione a la clase trabajadora, para que entren a luchar junto al partido, por un verdadero programa socialista, haciendo un llamado conjunto a las fuerzas de izquierdas y a los sindicatos, para preparar un Gobierno de coalición PSOE con Izquierda Unida, que cuente con un verdadero apoyo social, o podríamos sufrir una amarga derrota a manos del PP”.(…)
El articulo mencionado en el primer párrafo, titulado “Desenfoque presidencialista”, el compañero Pérez Tapias dice: “Nos hemos tragado el anzuelo. Llevamos meses preguntándonos los socialistas cuándo aclarará su futuro el presidente Zapatero. Es más, la espera está situada en cuándo dirá que no se presenta a las próximas elecciones generales. Tan inquieta ansiedad ya supone muchos tantos a favor del PP.
“Sabemos que la crisis es profunda y achicharra a los gobiernos, así como que las duras medidas de ajuste han sido percibidas como giro político difícil de compartir; asumimos que ha habido errores en la acción de gobierno y fallos en la comunicación; es evidencia palmaria que la imagen del presidente está muy erosionada y que de todo ello se pagará parcialmente factura en las próximas elecciones municipales y autonómicas.
“Ahora bien, ¿hay que deducir de esas premisas como conclusión que el anuncio de que Zapatero ya no será candidato, hecho incluso en medio de una fuerte crisis internacional como la que supone la intervención militar en Libia, aliviaría nuestras penas y sería un revulsivo hasta el punto de frenar las tendencias que la demoscopia nos traslada? Caben serias dudas.
Efectivamente, las dudas son enormes, sobre todo para los votantes socialistas, que se tragaron por la fuerza el “OTAN, DE ENTRADA NO”, que vieron con ilusión la retirada de las tropas de IRAK, pero dudaron de la maniobra de potenciar la guerra de Afganistán, pero lo que realmente crea la duda actual, reflejada en ese 40 % de las encuestas que dicen “No a la Guerra de Libia”, es la frustración que crea en la conciencia de los votantes que quieren otra forma de actuar, como corresponde a un partido de izquierdas y no que se siga en la línea de defender todo lo que le marca la derecha y el imperialismo.
Continúa el artículo con otros párrafos interesantes y que suscitan una necesidad de conocerlos y debatirlos, esperamos que se haga en el Comité Federal de mañana, (…)“Puede que el presidente Zapatero, secretario general del partido, además de consultar otros oráculos antes de dejarse caer con la declaración de que ya tenía una decisión tomada, y la conocían su mujer y un ilustre compañero, también se dejara impactar por los consejos del aragonés Gracián en su Oráculo manual y arte de la prudencia, en especial donde advierte sobre la “atención a los finales”: “Es frecuente –escribió tan incisivo pensador- que los afortunados tengan muy favorables comienzos y muy trágicos finales. El punto no está en el vulgar aplauso de la entrada, que todas son plausibles, sino en la general aceptación de la salida, que son más raras. Pocas veces acompaña la suerte a los que salen”.
Sigue diciendo: “Si así vienen dadas, nada extraña el afán por una salida lo más airosa posible. Habrá que tener en cuenta, y podemos estar seguros de que se contemplará, el interés del partido y el invocado interés general. Otra cosa es acertar”.
Interesantes cuestiones las que plantea, que nos tienen que hacer reflexionar, sobre todo a la Dirección de nuestro partido, cuando continúa diciendo Pérez Tapias: (…) ¿Es que no utilizará la derecha el anuncio de retirada, tanto como la decisión de permanencia, para reforzar su énfasis en una debacle del PSOE? ¿Hasta qué punto una parte del electorado saldrá de la abstención o no aplicará un voto de castigo una vez que ya no tenga por objeto echar a Zapatero? ¿Es que el electorado no piensa que, como va de suyo, ha sido todo el PSOE, incluidos barones, alcaldes y candidatos, el que se ha puesto detrás de las políticas del gobierno, aun cuando haya habido comedidas críticas y tímidas advertencias? ¿Es que no se desviará el foco desde autonómicas y municipales a unas generales inminentes?
“Puestos a hablar de sucesión, alejándonos de la manera en que suele hacerse, que suena demasiado a linajes o predeterminaciones por más que se insista en unas primarias en las que muchos no creen, valdría tomar prestada la conocida frase de Lenin y parafrasearla preguntando: sucesión, ¿para qué? ¿Para qué política futura? ¿Para qué propuesta de reconstrucción de un proyecto socialdemócrata? ¿Para qué proyecto de España? ¿Para qué idea de Estado laico? ¿Para qué política internacional? ¿Para qué modo de reorganizar el partido? Respondiendo a cuestiones como éstas tiene sentido abordar la sucesión, de lo contrario seguiremos atrapados en el desenfoque presidencialista con el que se viene tratando.
Todas esas interrogantes son muy necesarias que se planteen por los representantes de nuestra corriente en el Comité Federal, que es el órgano de mayor rango entre Congresos, para aclarar la línea política y las cuestiones a debatir, fomentando el debate, exigiendo autocrítica y solicitando rectificaciones a los errores cometidos.
En el párrafo final, puede leerse: “ Tal como está el patio, se puede traer a colación la reflexión de Gramsci en La política y el Estado moderno al decir que “en la lucha siempre se tiene que prever la derrota: por eso la preparación de los propios sucesores es un elemento tan importante como todo lo que se hace para vencer”. Dejando sentado que no hay que resignarse ante ninguna previsión de derrota, el punto crucial está, ahora y para el futuro, en SALIR DE PLANTEAMIENTOS PRESIDENCIALISTAS, ajenos a la mejor tradición del PSOE y chirriantes con nuestras estructuras institucionales. Son los que conducen a discutibles modos de ejercer el liderazgo y a una comunicación supuestamente directa con los ciudadanos a través de los medios –donde la mediación se convierte en mediatización conducente al fracaso-. Por ello, si se tiene claro el para qué de la sucesión, no es menos importante el cómo, incluyendo la recuperación del valor del partido como espacio de debate político y participación democrática. De lo contrario, las derivas presidencialistas seguirán dando oportunidades a la derecha, que por algo funciona con claves que no son las que necesitamos en la izquierda”, concluye Pérez Tapias.
Nosotros insistimos en que los militantes socialistas que quieran poner fin a la deriva derechista del partido tienen que dar un paso al frente, no quejarse tanto desde fuera, arrimar el hombro y ayudarnos entre todos a conseguir democráticamente lo que en tantas mentes está latente: El socialismo tiene que prepararse para una lucha implacable contra la derecha del PP, pero también contra el reformismo de derechas, social-liberal, que domina en el partido.
En otras palabras, es necesario re-descubrir las ideas y el programa del auténtico socialismo, que defendieron los clásicos del marxismo, encabezados por Pablo Iglesias, porque las situaciones históricas de las crisis cíclicas del capitalismo se repiten, pero cada vez a un nivel superior y tenemos que estar a la altura de las circunstancias que la situación de crisis actual requiere. En los momentos actuales, la lucha firme por el verdadero socialismo es más necesario que nunca, porque el capitalismo ha entrado en descomposición y arrastra a la humanidad hacia la miseria, el paro y la degradación. La lucha continúa…
ÁREA DE COMUNICACIÓN Y FORMACIÓN.
IZQUIERDA SOCIALISTA DE MÁLAGA-PSOE-A
(*) L@s interesado@s en leer este documento pueden solicitarlo al correo abajo indicado:
Is-psoe.malaga@terra.es
1 de abril de 2011
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