El capitalismo
financiero y parásito ha instaurado en casi todos los países, incluso en el
Estado español un gobierno títere que aquí encabeza Rajoy desde hace cinco años,
hecho a medida de los intereses de la especulación,
de la corrupción de los banqueros y la
economía de casino mafioso. Este sistema dirigido capitalista conservador y de recortes sociales ha provocado
desequilibrios y desigualdades crecientes que se están haciendo insostenibles y
que en un momento dado puede derivar en una rebelión de la clase trabajadora,
que buscará el camino de los cambios profundos que la sociedad necesita.
La desastrosa política
económica del PP ha conseguido aumentar
el sufrimiento de los trabajadores
ejerciendo una brutal violencia moral y también real y represiva en una guerra
no declarada del rico contra el pobre. El Gobierno del PP ha realizado una
brutal regresión, con recortes y ataques a la Educación, Sanidad y servicios
públicos, para satisfacer a la Patronal, a la Iglesia, a la Banca y a las multinacionales.
La clase trabajadora
sufrimos las medidas económicas de este gobierno del PP que sólo sirven para
que una minoría de banqueros nade en la abundancia, reduciendo nuestro nivel de
vida. Vemos hoy en el banquillo de los acusados a los responsables del saqueo
del Estado, como los Ratos, los Blesas, los Bárcenas y demás cuadros del PP, e
incluso ese mismo partido está encausado como una trama para delinquir. La lucha de clases se agudizará al verse
forzada las masas a luchar para rechazar los recortes y las privatizaciones de
lo público, los ataques al subsidio de paro, de las pensiones y demás medidas
reaccionarias. El PP está atacando a los
sectores más débiles y beneficia a los banqueros que son en verdad sus amos a
los que la derecha les rinde pleitesía.
Existe una tendencia que
se refuerza, hacia la depresión en la
economía española, que crece de forma desigual, fabricando en un polo cada vez
más millonarios, mientras el número de pobres se incrementa sin cesar. Con ese
método, el PP nos lleva directamente a la catástrofe. Ante esa catástrofe
económica, política y social provocada
por el PP la única solución que éste plantea, es más “recortes permanentes”, por lo que el camino que nos deja es continuar
la lucha hasta tumbarlos, levantando una alternativa socialista genuina. El
objetivo del PP no es otro que seguir eliminando nuestros derechos democráticos
y privatizar el Estado, apropiándose de todas las empresas que les sean
rentables.
La ciudadanía está en
una situación híper-crítica cuestionándolo todo, expresado en movimientos de
los “indignados” que comenzó con el 15M
y que se ha expresado políticamente en
Podemos, que juntos ahora como Unidos Podemos, puede retar al modelo liberal-burgués,
pero ser crítico es proponer cambios y luchar de forma permanente y organizada,
de lo contrario toda protesta es
estéril. Puede haber concentraciones, marchas, protestas y huelgas pero en
definitiva, si no se cuestiona el modelo capitalista, que es el que está
colapsado, no encontraremos soluciones definitivas, por lo que las
organizaciones de izquierdas tienen que ofrecer propuestas alternativas de
sistema, buscando la Unidad entre PSOE+Unidos Podemos y demás fuerzas
sindicales, sociales y progresistas en un frente común de lucha.
La acumulación de
riquezas en cada vez menos manos es una afrenta mientras en el otro polo se
agudiza la miseria, el paro y la pobreza. Los 200 españoles más ricos poseen un
patrimonio de 145.800 millones de euros, mientras 20.600.000 personas no llegan
a "mileuristas". La
descomposición del régimen se detecta en la insuperable crisis global,
política, económica y social, que ha provocado un trasvase enorme de dinero del
pueblo hacia las arcas de los banqueros, mientras los trabajadores del sector,
que eran la “aristocracia obrera de cuello blanco”, están siendo, como el
resto, muy perjudicados, pasando a ser
“obreros intelectuales miserablemente explotados”. Esos trabajadores “bancarios”
están sufriendo también las consecuencias de los desfalcos y la mala gestión de
sus Jefes (Existía un Plan secreto que planeaba que serán despedidos en torno a
55.000 bancarios)
Por otra parte, la fuga
de capitales ha sido colosal, calculándose por algunos economistas a casi un 30
% del PIB y el doble del capital que poseen los 200 ricachones más acaudalados,
que junto con el montante de la economía
sumergida que se calcula en torno entre
el 25 % y el 30 % del PIB, arroja la friolera
de 600.000 millones de euros, que están fuera del circuito monetario legal.
Todas esas barbaridades
acrecientan el malestar y la "indignación " de la ciudadanía que
sufre paro, escasez e incluso miseria,
porque según la encuesta de la EPA cerca
de un 4o % de los registrados en las colas del paro, NO PERCIBEN YA NINGUNA
PRESTACION, lo que incrementa el grado de descontento, que van a traer convulsiones sociales y las manifestaciones,
más temprano que tarde.
Todos sabemos que los
capitalistas no invierten por el amor al prójimo, a los parados, o a la
juventud, sino para obtener más ganancia, aun creando malestar, siguiendo la
lógica capitalista del máximo beneficio en el menor tiempo posible. Cada vez
más trabajadores están comprendiendo que hay que luchar y que es necesario
organizarse pero no solo en plan sindical sino en el plano político, también
para adecentar y controlar a tanto político profesional que lo están haciendo
incorrectamente, acabando de una vez con los despilfarros y la corrupción.
Nosotros como corriente
Izquierda Socialista venimos insistiendo que la democracia y el socialismo no se "otorgan" sino que se conquistan
día a día en la lucha, pero necesitamos estar mejor organizados y golpear
unidos contra el gobierno y la patronal. Llevamos tiempo esperando el Congreso
del PSOE que se aplaza una vez más, para
presentar nuestras Propuestas Alternativas que podríamos denominar como “Por un
Estado Socialista y Federal” (*), abriendo el debate que exigimos que debe ser
democrático y desde las bases, para que las diversas corrientes, declaradas y
no declaradas, como son la tendencia socio-liberal que se empieza a consolidar,
la socialdemócrata, y la Izquierda Socialista, podamos decidir democráticamente qué tipo de
programa y cuál es la mejor dirección
para ir preparando la alternativa necesaria al PP, cuando llegue el momento.
El objetivo tiene que
ser la Unidad, pero esa, sin saber
claramente por qué vamos a luchar, esa unidad es imposible porque la clase
trabajadora está muy descontenta con las direcciones actuales mayoritarias y
sobre todo, con algunas que parecen preferir las alianzas con las derechas, en
vez de trabajar por la unidad de las izquierdas. Por ello es preciso debatir en
pro de la Unidad pero por un programa genuinamente socialista, que tiene que
ser explicado, debatido y conocido por los trabajadores, para cambiar el modelo
burgués de este capitalismo mafioso de casino que miente, oprime, explota y nos lleva al desastre.
Si avanzamos hacia la
unidad, nos organizamos mejor, hacemos una campaña para fortalecer las corrientes internas, tanto en las
organizaciones sindicales como políticas
de la izquierda, actuando con
contundencia, honradez y firmeza en unidad de acción, podremos frenar e incluso tumbar a las
derechas, pero para ello las acciones de masas deben proseguir y ser
coordinadas y continuadas a la vez que avanzamos en la lucha hasta conseguir el
programa adecuado y la dirección correcta que nos permita llevarlo a cabo.
Para ello es
imprescindible que el PSOE gire a la izquierda como estamos proponiendo desde
Izquierda Socialista, levante la bandera
del genuino socialismo, como partido mayoritario de la clase trabajadora, para
proponer la unidad en defensa de un nuevo programa de clase a los sindicatos y
partidos, para forjar entre todos una
potente alternativa que aglutine mayoritariamente a la clase trabajadora, para
oponernos contundentemente a la barbarie capitalista que nos ofrece el PP, y
esa alternativa tiene que contemplar la nacionalización del capital
financiero, expropiando a los banqueros
mafiosos y sus monopolios, para crear un banco público estatal, (que garantice
el dinero de los ahorradores y cuentacorrentistas) que permita gestionar la
economía democráticamente al servicio de los trabajadores, como el paso previo
para conquistar unas condiciones de vida y trabajo dignas, alcanzando el pleno
empleo para todos, defendiendo la
sanidad, la educación, los servicios
públicos y un plan de producción, mediante la planificación científica de los
recursos productivos, que defienda a los jóvenes, a los trabajadores, a los
pensionistas y demás capas más desfavorecidas
y estableciendo las bases para una verdadera democracia, la democracia
socialista de los trabajadores que somos la mayoría aplastante de esta
sociedad, con el objetivo de avanzar hacia un nuevo modelo social y económico,
más justo, libre, democrático, federal, laico, cooperativo e igualitario: Es decir la genuina sociedad
socialista.
ÁREA DE COMUNICACIÓN.
IZQUIERDA SOCIALISTA
DEL PSOE-A
(*) Si quieres conocer el documento mencionado,
solicítalo gratuitamente a la dirección de abajo, poniendo en asunto “Por un
Estado Socialista y Federal”:
ispsoeandalucia.malaga@gmail.com
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