se prolongue en exceso en el tiempo desató ayer una sesión de fuertes ventas en los mercados. El Ibex sufrió la mayor caída desde agosto, al perder el 2,46%, las primas de riesgo se ampliaron y el euro cedió hasta 1,346 dólares.(Cinco Dias.com 17-11-10)". 
"Cae Wall Street por temores sobre economías en Asia e IRLANDA. Los precios de las acciones descendieron el martes a su menor nivel en un mes, al aumentar los temores en torno a una desaceleración económica en China y a la crisis financiera en IRLANDA (...)De acuerdo con cálculos preliminares, el índice industrial Dow Jones perdió 178 puntos, el 1,6%, a 11.024. El S&P 500 descendió 19 unidades, el 1,6%, ubicándose en 1.178, mientras que el compuesto Nasdaq bajó 44 puntos, el 1,8%, finalizando en 2.470.(La Voz de Houston. The Associated Press 16-11-10)". "El Dow sufre su peor sesión desde agosto aunque salva los 11.000. La bolsa neoyorquina sufrió una jornada de fuertes ventas lastrada por los problemas de deuda soberana en Europa y con el temor a una pronta subida de tipos en China. El Dow Jones vivió su peor sesión en tres meses, aunque al cierre logró mantener el nivel de los 11.000 puntos.(...) Y desde Europa la presión bajista no hizo otra cosa más que empeorar la situación. El rescate de IRLANDA sigue sin concretarse y provocó el nerviosismo entre los inversores. Tanto en el FTSE 100 londinense, como en el CAC francés, las caídas superaron el 2%. El mismo comportamiento tuvo el Ibex español, que sufrió su mayor correccion desde agosto al dejarse un 2,46%. La caída del Dax alemán fue ligeramente más modesta, con un descenso del 1,7%. (Expansión.com-Invest 16-11-10)".
La situación actual de la política a escala mundial, está caracterizada por una enorme inestabilidad, porque hemos entrado en uno de los períodos más turbulentos de la historia, lo que refleja el callejón sin salida del sistema capitalista. Los conflictos, las guerras, el terrorismo con toda esa vorágine de violencia, están hundiendo al planeta en una situación caótica. Esta es la expresión incontestable de que el sistema socioeconómico imperialista ha superado ya su utilidad histórica, por lo que ahora se ha convertido dialécticamente en una barrera que impide el progreso de la humanidad pero está luchando como un boxeador sonado, que se niega a abandonar el ring. Necesita el golpe final de la clase trabajadora para que bese la lona completamente noqueado.
Como explica la dialéctica, la agonía del capitalismo está preparando las condiciones subjetivas, porque las objetivas están super-maduras, para que se produzca el nacimiento de un sistema alternativo. Está madurando por debajo de la superficie el proceso molecular de la toma de conciencia para la transición al socialismo. Vemos en todas partes un enorme fermento que lo confirma. Este proceso encontrará su expresión en la conciencia de las masas, con ritmos y formas diferentes, manifestándose en todo tipo de crisis, explosiones sociales, cambios políticos que forzarán cambios e incrementos en la conflictividad social.
Unas de las causas fundamentales de esta situación viene provocado por el brutal aumento de la desigualdad social, pues los ricos siguen haciéndose obscenamente ricos, incluso enmedio de esta desastrosa crisis, mientras que una capa cada vez mayor de la sociedad, incluido los países más ricos, están hundiendo a capas de sus propios trabajadores en la absoluta pobreza. Es el llamado proceso de concentración del Capital.
Esa situación se ve infinitamente agravada en los países más débiles. En esas zonas, muchas de ellas ricas, pero empobrecidas por la explotación y los saqueos de las multinacionales imperialistas, la crisis capitalista representa guerras, muertes, miseria, enfermedades y terror para millones de seres humanos. Entre la clase trabajadora y la juventud se cuestiona de forma creciente el sistema capitalista que no puede dar respuesta a los problemas sociales. En los países desarrollados, las protestas de la juventud se expresan en los movimientos “antiglobalizacion”, en las manifestaciones de masas contra las guerras, en las luchas de los estudiantes y del movimiento obrero, lo que reflejan síntomas de una tendencia creciente de los jóvenes que quieren un cambio social profundo, pues comprubeban que el capitalismo les ha robado su futuro. El ciclo económico actual está totalmente agotado y sobre ello pende la amenaza de una recaida que agudice la profunda recesión a escala mundial.
La economía es decisiva en el desarrollo de los acontecimientos históricos, pero sólo en última instancia. Lo importante es cómo se refleja la situación económica en las condiciones de vida de las masas. Tenemos un crecimiento económico raquítico en casi todos los países e incluso muchos con crecimiento en torno al 0 %. Al mismo tiempo vemos ataques directos a los niveles de vida de los trabajadores. Mientras que en el pasado, el crecimiento económico implicaba salarios altos y beneficios sociales, desempleo reducido y reformas, hoy coexiste con cierres de fábricas, ataques a las pensiones, congelamiento salarial y sobreexplotación salvaje. La burguesía ha mantenido o acrecentado sus ganancias sobre explotando a los trabajadores, estableciendo una dictadura en las fábricas, y aumentando la explotación del mercado mundial a través de una mayor división internacional del trabajo, o como ellos dicen: con globalización.
ESTADOS UNIDOS.
En los EEUU, hay elementos de una crisis que se parece cada vez más a una crisis del propio régimen. La popularidad de Obama está en tasas muy bajas. Los ciudadanos están decepcionados porque ha sido incapaz de cumplir sus promesas de mejoras sociales, como en sanidad, educación y creación de puestos de trabajo. También la gran mayoría de la opinión pública estadounidense se opone a las guerras de Afganistán e Iraq. La pobreza crece y el paro es alarmante.
Como en Europa, en los EEUU hay tasas de crecimiento reducidas. Para intentar evitar la bancarrota económica del sistema, el gobierno de Obama se ha comprometido a inyectar otros 600.000 millones de dólaresa a la economía, después de llevar ya gastado entre todos más de 20 billones de dólares con muy escasos resultados, para reflotar a la banca y salvar al capital. Los abultados crédidos han provocado un endeudamiento sin precedentes de las familias, de las empresas y del Estado; al mismo tiempo que ha recortado los impuestos a los ricos y aumentado los gastos armamentísticos. Lejos de avanzar hacia el cambio prometido con el "Yes, we Can", parece que el gobierno de Obama se ha entregado a los conservadores que han ganado las últimas elecciones, ante su incapacidad para hacerles frente para cumplir sus compromisos electorales.
El sistema capitalismo en EEUU está basado en una gran montaña de deudas, bonos basura, burbujas y pelozados que todavía no se han saneado. Lo que han conseguido por ahora es retrasar el colapso. Pero están preparando una catástrofe mayor porque están empezando a cebar la bomba de una nueva burbuja financiera. La economía ha empezado a crecer por arriba, pero por abajo el tejido industrial sigue destruyéndose. La profunda crisis de la industria automotriz es tremenda. La economía, a pesar del crecimiento formal, tiene resultados catastróficos para los trabajadores. El desempleo es mucho mayor que el informado oficialmente. La crisis de las empresas de automóviles va a marcar la tendencia al resto de los sectores industriales.
Mas allá del análisis del ciclo es importante aclarar de qué forma viven las masas. En los últimos 20 años no hubo un aumento real en el nivel de vida de los trabajadores. Acontecimientos como el desastre provocado por el huracán Katrina en Nueva Orleáns demostraron la polarización social en EEUU. Se ha producido un cambio importante en el papel de EEUU en la economía mundial. En los años 20 EEUU se había convertido en el principal acreedor del mundo. Ahora se ha transformado en el principal deudor. En el 2003 su deuda neta era 2,7 billones de $US (el 7,5% del PBI mundial). China y Japón (principales beneficiarios del comercio con EEUU) son los mayores compradores de los bonos del Tesoro (deuda pública) y los principales interesados de que no haya ninguna crisis en EEUU, por la reducción que sufrirían sus exportaciones a EEUU. Ahora, con la bajada del dólar que representará la inyección de los 600.000 millones de dólares, la guerra comercial contra China y Europa puede estar detrás de la puerta.
El enorme déficit de la economía de EEUU (los déficits comercial y estatal combinados superan ampliamente el billón y pico de dólares) genera dudas sobre que EEUU pueda devolver sus préstamos. EEUU depende dramáticamente del capital financiero extranjero para sostener sus gastos públicos y su sistema financiero. Si este flujo se cortara, el sistema financiero norteamericano quebraría y esta vez de verdad, no habiendo recursos suficientes para salvarlo. Pese a las fluctuaciones producidas en el valor del dólar en los dos últimos años, ahora parece haber tomado un curso claramente descendente. La burguesía norteamericana está provocando la caída del valor del dólar para intentar disminuir su déficit comercial gigantesco, mediante la expotación y echarle la crisis a los demás. Pero todos quieren hacer lo mismo. Por eso ha fracasado la reunión del G-20. Ahora bien, si el valor del dólar cae a niveles muy bajos reduciría, más allá de lo permisible, las ganancias de los inversores extranjeros que tienen depositadas cantidades astronómicas de dinero en la deuda pública norteamericana. Esto podría detener el flujo de divisas a la economía estadounidense con las consecuencias graves.
Otro problema que tienen es que si las tasas de interés suben, para seguir atrayendo dinero del extranjero, se encarecerán aún más los créditos, lo que reduciría el consumo de las familias y las ganancias empresariales y la inversión, abonando el camino a una profundización de la recesión, porque sus efectos lastrarian la tan ansiada recuperación. Otro factor desestabilizador sería la guerra comercial, que es el peor de los escenarios. Todo ello está detrás de las bases débiles de este crecimiento económico. Por ello se habla de un posible efecto W de la recesión, o incluso de lo más peligroso, el efecto L, que representaría años de estancamiento acompañado de inflación.
La burguesía está muy nerviosa y cualquier acontecimiento como una mayor subida de los precios del petróleo, aumentando los costos de las empresas y las familias, puede hacer saltar todo. Es cierto que China ha jugado un papel muy importante en el sostenimiento de la economía, al seguir creciendo a una media del 10 %. Ha venido China sustituyendo a los EEUU como principal exportador de tecnología de calidad a bajo costo, pero eso ha representado un enorme dumping social que ha acelerado la tendencia a la reducción de la tasa de ganancias, junto con la saturación de los mercados y la Ley de la Tendencia a la caída de la tasas de beneficios, inherente al capitalismo, que está operando de forma brutal, frenando el desarrollo de las fuerzas productivas de forma dramática.
El crecimiento desmerusado de la economía china tiene límites, sobre todo, en momentos de estrechamiento de los mercados como ahora con la recesión. El movimiento en dirección al capitalismo y el abandono de una economía planificada han venido preparando el camino, durante años, para una crisis masiva de sobreproducción en China, con una avalancha de mercancías sin vender, por lo que necesitan exportar y si no lo hacen con suficiente fuerza, pueden sufrir una recesión, que sería una catástrofe mundial; o incluso una bancarrota del sector inmobiliario, que está sobre recalentado. Por eso está inundando los mercados de todo el mundo con sus mercancías. Los EEUU, la Uniòn Europea y demás potencias, están alarmados con esto. Hay quién propone aranceles muy fuertes contra las mercancías chinas.
Si hay un aumento serio del desempleo en EEUU veremos crecer las tendencias proteccionistas rápidamente: acelerando la devalución de su moneda para exportar más barato, poniendo topes a la importación de mercancías o subiendo las tarifas arancelarias lo que, de ser seguido por otros países, reduciría el comercio mundial y por consiguiente, la actividad económica general, lo que también contribuiría a una profundización de la recesión de la economía internacional, caminando desenfrenadamente hacia la temida depresión. No podemos olvidar que las tendencias proteccionistas llevaron a la Gran depresión de los años 30, con las consecuencias sociales y políticas conocidas.
El Fracaso de la Europa de los Mercaderes.
Hemos podido comprobar cómo en los años últimos la economía de la Unión Europea ha entrado en una crisis de descomposicion. Europa es un continente en declive. La feroz competencia en el mercado mundial les ha hecho perder, año tras año, mercados y fuentes de materias primas a manos de sus competidores: EEUU, China y Japón. Por eso el capitalismo europeo ya no puede mantener las conquistas que en el pasado consiguieron los trabajadores, y se han generalizado los ataques contra las pensiones, los salarios, la jornada laboral y los derechos sociales.
El desempleo es alto en todos los países. Grecia, Irlanda, Portugal, Italia yEspaña, pero también Alemania y Francia, que se suponían las locomotoras del capitalismo, tienen déficits estatales elevados. Por eso se ven obligados a atacar los niveles de vida de los trabajadores, provocando una polarización mayor de la sociedad. Esos recortes constantes incrementan la conflictividad social a la vez que preparan el terreno para convulsiones y luchas más violentas entre las clases sociales.
En los últimos meses hemos venido observando una oleada de huelgas generales y movilizaciones masivas en un país tras otro. En Grecia hubo otras varias huelgas generales contra un gobierno de izquierdas recientemente elegido, como rechazo a los ataques a la clase trabajadora, para salvar de la bancarrota a la Banca. En Irlanda hemos visto en estos momentos la situación dramática, si quebrará ahora o dentro de unos meses. En Francia, el goberno Sarkozy está totalmente desprestigiado y agobiado por las huelgas generales. Portugal, hemos visto numerosas luchas en los últimos tiempos y encara el día 25 la Huelga General de protesta por los recortes. En general, por el carácter de las direcciones reformistas del movimiento obrero, hubo muchas derrotas parciales aunque los capitalistas no han podido aplicar toda su política de contrarreformas con la tranquilidad que ellos necesitan. En cualquier caso, las implicaciones políticas en la clase obrera ya están apareciendo.
Francia es un país rico y desarrollado, pero lo que pasó en los levantamientos de los arrabales de las ciudades, con la quema de coches y los levantamientos juveniles se van a quedar como una anécdota, para lo que puede ocurrir a partir de estas movilizacione últimas. Las recientes luchas contra un plan de recorte de las pensiones, refleja una situación explosiva. Toda esta frustración se expresa contra el gobierno derechista de Sarkozy. Ese gobierno ha aplicado medidas xenófobas y racistas con la campaña de deportación del pueblo gitano, que nos han hecho recordar procedimientos "nazi-fascistas". Como una expresión de todo lo anterior, hemos visto desarrollarse una rebelión entre la juventud y los trabajadores que ha acelerado el proceso molecular de toma de conciencia de las masas que han girado a la izquierda, haciendo crecer a los sindicatos y partidos de izquierdas. Esta lucha adquirió una fuerza y una extensión no vista desde la revolución de mayo del 68. Si esta extraordinaria lucha no va a más se debe al papel de apagafuegos de los dirigentes obreros reformistas que tenían tanto o más miedo que la burguesía y han empezado a dividir al movimiento.
Italia sufre un "cáncer terminal" catalogado como "berluscoma galopante". La debilidad económica del capitalismo italiano se refleja a nivel político con una corrupción mafiosa que corroe sus entrañas. Berlusconi se está quedando aislado porque sus propios socios de coalición comandados por filofascista Fini que le ha abandonado. Ha explotado demagógicamente en su favor los discursos xenófobos, machista y racistas, a la vez que ha acumulado un poder económico y mediatico que está cercano al monopolio. Utiliza un lenguaje provocadoramente reaccionario contra los inmigrantes y las izquierdas, apelando al miedo y la incertidumbre provocados por la crisis económica. El movimiento obrero está empezando a luchar y en los proximos meses darán el salto cualitativo contra los ataques que está recibiendo.
En el Estado español, el gobierno del compañero Rodriguez Zapatero preside un incremento del malestar social como el hombre que monta a lomos de un tigre. Está siendo vapuleado por Rajoy y la derecha del PP que están furibundos. Por la izuierda se ha enfrentado a los trabajadores y a sus sindicatos. Los recortes sociales fueron rechazados por la Huelga General del 29-S pero las direcciones sindicales están dejando enfriar el ambiente porque están muy preocupados con lo que puede ocurrir porque existen condiciones objetivas para que ocurra algo similar a lo de Francia, si las direciones plantearan un programa firme y fuesen hasta el final en su defensa. La derecha y la Iglesia organizan constantes provocaciones, con una crítica despiadada con el objetivo de desestabilizar al gobierno en temas como la política exterior, la defensa demagógica de los pensionistas, y la cuestión nacional de vascos y catalanes. Tambien el PP viene ocultando su programa, porque es de recortes drásticos contra la clase obrera, tal cual han empezado a insinuar, que sería en la línea de la derecha de Gran Bretaña. La situación tiende a producir una creciente polarización a derecha e izquierda por abajo y una gran abstenciòn polìtica en las pròximas elecciones porque los ciudadanos están frustrados con todos los gobiernos que han votado en los últimos años, que han sido incapaces de dar soluciones a la cuestiónn social.
La alternativa al caos actual a la que está abocado el sistema capitalista, requiere un programa auténticamente socialista que acabe con el peso muerto de la propiedad privada de los medios de producción y las fronteras nacionales, que son los dos frenos absolutos que impiden salir de la recesión. En la situación actual, cualquier gobierno de izquierdas que plantee a la sociedad el tomar en las manos de los ciudadanos las palancas fundamentales de la economía, bajo control democrático de la clase trabajadora, sería saludado con fuerza por el movimiento obrero y sus sindicatos. Asi se podría utilizar toda la capacidad productiva de la sociedad y planificar racional y armónicamente los recursos económicos para producir al servicio de los seres humanos y no de las mafias del capital. En una semejante situación la situación social y económica se podrían transformar de inmediato, se lograría de forma rápida eliminar la lacra del paro, garantizando a todos un puesto de trabajo digno y bien remunerado.
En base a una planificación socialista de la economía sería completamente realizable el introducir la reducción de la jornada laboral, sin recortar los salarios ni las pensiones, permitiendo a la mayoría de la población participar activamente en la gestión de la vida social, en la economía, la polìtica, la cultura y en el control de la producción general, eliminando la especulación, la explotación y el robo sistemático al que nos somete el capitalismo. La economía dejaría de ser el monopolio de la clase burguesa dominante. No existiría ningún impedimento para poder garantizar a todos una vivienda pública decente y asequible, una enseñanza, una sanidad y unos servicios sociales gratuitos y con la mejor calidad.
Este modelo alternativo, democrático y socialista es el que los grandes medios de comunicación dominados por la burguesía y defensores de la ideología de derechas dominante, se encargan permamentemente de ocultar o censurar. El socialismo se ha convertido ya en una necesidad imperiosa para la humanidad, pero no nos va a venir caído del cielo como dicen que vino el maná. Debe ser producto de la lucha consciente, organizada y unitaria de la clase trabajadora para tomar en nuestras manos el programa auténticamente socialista por el que merece la pena luchar. Movilízate y únete a la lucha por un mundo mejor, porque otro mundo tiene que ser posible, SI, pero con el verdadero SOCIALISMO.
ÁREA DE COMUNICACIÓN Y FORMACIÓN.
IZQUIERDA SOCIALISTA DE MÁLAGA-PSOE.A
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