Al cumplirse el primer año de la
jornada histórica de 1-0-17, cuando el pueblo de Cataluña rechazó con su voto a
la Monarquía y al Gobierno Rajoy, aunque fuese declarado ilegal con la
aplicación del Artículo 155 de la C.E. de
nuevo se llenaron las calles y plazas donde cientos de miles de ciudadanos siguen
reclamando la república y la salida de los presos y el retorno de los exiliados.
Hubo una potente manifestación que abarrotaba
las calles de Barcelona. Desde el principio en “Via Laietana hasta Plaça Sant
Jaume” todo el recorrido estaba repleto. Fue una demostración de fuerza
impresionante. Los ánimos estaban caldeados porque los Mossos d’escuadra
intervinieron para reprimir a grupos de jóvenes muy radicalizados, al igual que
ocurrió el día anterior.
La movilización popular fue histórica
encabezada por la juventud estudiantil desde las primeras horas de la mañana
con activistas de los Comités de Defensa de la República (CDR) que es una
fuerza política que actúa de vanguardia y bien organizada, aunque algunos
sectores muy radicalizados sufrieron la represión de los Mossos d’escuadra que
tuvieron que intervenir a fondo y la violencia fue respondida con más violencia.
La manifestación transcurrió en
Barcelona con un gran entusiasmo y combatividad y relativamente pacífica, salvo
esos enfrentamiento entre grupos y Mossos y grupos violentos, oyéndose
constantemente cánticos a favor de la libertad de los presos y condenando la
violencia pero exigiendo una Huelga General para seguir reivindicando la
República. Consignas contra el Capitalismo y la Corona también entonadas con
fuertes gritos y firmeza.
Cualquiera pude reconocer que se nota
una división interna entre los diversos grupos que defienden la independencia,
con críticas al PDeCAT, al Govern y a ERC, donde se percibía un cierto cabreo
por la represión desatada el sábado 29 por los Mossos d’Escuadra, cuando hubo
un enfrentamiento entre grupos de manifestantes de ambos bandos, por una parte
los españolistas “patrióticos” que homenajeaban a policías y guardias civiles
en su intervención del año pasado y grupos de catalanistas independentistas
radicalizados, que dejó un saldo negativo de heridos, apaleados y contusionados
por ambas partes.
Es preciso resaltar que se observa un
incremento de firme voluntad del pueblo, encabezado por la juventud, de llegar
hasta el final en defensa de la República, que empieza a crear una brecha
interna ya que choca con la necesidad del Govern y sus apoyos del PDeCAT, representantes
claros de la burguesía catalana que está muy alarmada ante la difícil salida,
como asimismo un cierto sector del ERC que necesitan frenar el movimiento antes
de que sea demasiado tarde y piden claramente sentarse a negociar una salida lo
menos traumática posible con el Gobierno de Pedro Sánchez.
El movimiento ha tomado un carácter
masivo y sigue acumulando independentismo por la falta de una perspectiva
viable a corto plazo y en realidad, está tomando un carácter
pre-revolucionario, porque una parte importante del pueblo se opondrá cada vez
más y con más firmeza a intentar negociar a espaldas y sin conocimiento de los
colectivos en lucha, si se continúan aplicando las nefastas políticas
capitalistas, de recortes y saqueos, que en el fondo, es la causa del malestar
al haber sufrido el pueblo una caída importante de los niveles salariales y de
vida.
En la manifestación se pedía también
la dimisión del Conseller d’Interior, que se puso de parte de la represión que
algunos colectivos habían sufrido en las cargas del domingo 30. Se gritaba
asimismo “Els carres serán sempre nostres”, que no necesita traducción. La protesta contra los medios de comunicación
españolistas también fue audible al señalar que ocultan la información del
sistema represivo y sistemático y agresiones violentas que sufren muchos
ciudadanos que se sigue incrementando quedando muchas de ellas en la impunidad.
Titulares de prensa confirman la
tensión creciente: “Torra amenaza con retirar el apoyo a Sánchez si no hace una
propuesta de autodeterminación en un mes”(El País.com 2-10-18) “C’s y PP
abandonan de nuevo el Parlament” (Lavanguardia.com 2-10-18). “La respuesta del Gobierno a la amenaza de
Torra de dejar caer a Sánchez: “”NO aceptamos ultimátums””. (Elmundo.es
2-10-18). Rivera (C’s) quiere poner en marcha su política testicular junto al
PP y dice que presentará una propuesta para aplicar el Artículo 155. Está claro
que las derechas apuestan por las “Botas”, es decir, por la escalada represiva
porque piensan que esa será una solución, pero ese proceso nos lleva a la
eliminación del modelo de “democracia burguesa” que, llevado hasta sus últimas
consecuencias, tendría que ser suspendida y significaría retornar al
franquismo, lo que el pueblo en su conjunto rechazaría más temprano o más tarde.
En un artículo anterior pudimos leer los
pronósticos sobre las perspectivas del conflicto que se decía: (…) “al final
nos encontraríamos con un dilema: Intentar una salida por métodos democráticos
y pacíficos, o sea por el “Voto”, o surgiría la violencia, la represión y el
enfrentamiento, o sea la “Bota” militar. Cualquier persona decente que se
considere demócrata podría pensar que es preciso intentar negociar una salida,
porque vimos cómo la política inmovilista aplicada por Rajoy y su pandilla de
asesores ineptos, fracasó cuando esperaban que el suflé bajase, pero ha
ocurrido todo lo contrario”. (*)
La realidad es que se incrementa la
indignación de la mayoría del pueblo catalán que lucha por el derecho a
decidir, viendo cómo se agudiza el conflicto de lo que han dado en llamar la
crisis del “régimen del 78” al que se responsabiliza de los recortes y la
represión, encarnados en la figura de la Monarquía, por lo que cada vez con más
firmeza y contundencia se reclama una república de los trabajadores, cuya
vanguardia es la juventud y el pueblo
organizado en los CDR, que empiezan a cuestionar la línea nacionalista y
avanzan hacia una salida de clase.
Por otra parte, cada vez más gente de izquierdas considera la
necesidad de resolver los problemas sociales y acabar con la pobreza, el paro,
los desahucios, la austeridad, el machismo y la represión, productos tóxicos de
la corrupción del sistema capitalista que genera esas lacras, que son los
mismos problemas que sufre la clase trabajadora del resto del Estado, y que
solo se conseguirá con una alternativa de clase, mediante un acuerdo de las
fuerzas de izquierdas que pongan en el punto de mira la necesidad de avanzar
hacia el Cambio cuyo objetivo debiera ser derrotar a las fuerzas reaccionarias
defensoras del Capitalismo que se ha convertido en un sistema agónico y cuya
única propuesta es la represión.
El capitalismo está caduco y agónico y
necesita ser transformado en un nuevo modelo de Estado Federal, Democrático,
Republicano, Solidario, Cooperativo y Socialista, donde podamos convivir todos
los pueblos ibéricos, como señala una noticia de Diario 16 (2-10-16) donde dice
que hay “un 48 % de los españoles a favor
de la unión entre España y Portugal”. En 2009 había ya más de un 40 % de
portugueses que eran partidarios de la unión, al igual que podrían convencerse
a la mayoría de los catalanes si se llegase a un acuerdo de compromiso de
cambiar la sociedad trabajando en un plano de igualdad, apoyo mutuo y solidaridad,
utilizando el voto para resolver los conflictos mediante Referéndum. Ante el grave y peligroso dilema,
la abrumadora mayoría que somos la clase trabajadora, la juventud y nuestras
familias, debiéramos apostar por el sendero de la lucha democrática y pacífica, pero masiva y firme, exigiendo y ejerciendo
siempre el Voto porque con el otro camino de la violencia o la represión, como
plantean C’s y PP para resolver cuestiones políticas por medio de los Jueces o
del Ejército, desembocaremos en la catástrofe. Recordemos una vez más que “solo
el pueblo podrá salvar al pueblo”.
ÁREA DE COMUNICACIÓN.
IZQUIERDA SOCIALISTA DE MÁLAGA-PSOE. A
(*)(Más información sobre el dilema de ¿Votos o Botas? pueden
encontrarla en el blog de Izquierda socialista de Málaga 12-9-18).
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