Presentamos el documento de análisis y propuestas alternativas que surge del debate cara a la Conferencia del PSOE, una vez concluida la fase interna de nuestra corriente, con las enmiendas admitidas, que ponemos a disposición de todos los trabajadores, tanto afiliados, militantes como simpatizantes para su conocimiento general, invitándoles a participar en la segunda fase que se abrirá el próximo mes de septiembre.
GIRAR
A LA IZQUIERDA PARA LUCHAR POR UN NUEVO PROGRAMA SOCIALISTA.
Índice:
PRESENTACIÓN
I.- INTRODUCCIÓN.
II.- BREVE ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN INTERNACIONAL.
III.- LA UNIÓN EUROPEA.
IV.- EL ESTADO ESPAÑOL.
V.- POR UN PROGRAMA SOCIALISTA ALTERNATIVO
QUE ACABE CON LA DICTADURA DE LOS MERCADOS.
VI.- ORGANIZAR LAS FUERZAS PARA LUCHAR POR UN CAMBIO
PROFUNDO EN EL MODELO DE SOCIEDAD.
VII.- MODIFICACIÓN DE ESTATUTOS: EN DEFENSA DE LA
DEMOCRACIA INTERNA.
PRESENTACIÓN.-
Este documento que ponemos a disposición de
todos los afiliados y militantes es un borrador para el debate que tiene como
objetivo dotar a nuestro partido de un programa para la acción, como propuestas
alternativas a las CONFERENCIAS DE OTOÑO. Pretende que sea el
resultado de una amplia discusión, desde las bases, con las aportaciones que se
vienen incorporando fruto de las diversas coordinadoras, así como enmiendas
individuales que se vienen recibiendo.
Contraponemos estas propuestas programáticas y
estatutarias a lo que llamamos la “dictadura financiera de los mercados”, a
esas políticas de derechas de los liberales, falsamente realistas que son
incapaces de sacarnos de la recesión económica, que nos condenan al paro, a la
exclusión y a la pobreza. Criticamos en estas propuestas alternativas la
política del pacto y la aceptación de la lógica del capitalismo del mal menor,
que siempre acaba siendo el mal mayor para la clase trabajadora a la que
nuestro partido se debe.
Como militantes socialistas tenemos que levantar la
voz con un discurso claro que conecte con el sentimiento de lucha y las
necesidades de los trabajadores, la juventud, los desempleados, los precarios y
los estudiantes… que están expresando en las calles y plazas que otro mundo no
solo es posible sino necesario. Nuestro partido, el PARTIDO SOCIALISTA OBRERO
ESPAÑOL, que es históricamente el de millones de trabajadores, tiene
que dar un paso al frente reorganizándonos y marchando en unidad de acción con
la clase obrera, la juventud y las organizaciones sociales, para cambiar
las cosas con un grito claro: PONER LA DEFENSA DE LOS INTERESES DE LOS
TRABAJADORES POR DELANTE DEL LUCRO PRIVADO DE LOS BANQUEROS.
I.- INTRODUCCIÓN:
Crece el debate de las bases sobre la
necesidad de reorganizar, fortalecer y unificar las fuerzas de la izquierda
para frenar la ofensiva brutal que está llevando el capitalismo a través de su
brazo político, el Gobierno del PP, contra los intereses de la clase
trabajadora y las capas menos favorecidas de la
sociedad.
Las política de derechas empujan a la
sociedad a una situación catastrófica y la clase trabajadora, junto a capas
menos favorecidas, están siendo afectadas por los ataques, recortes sociales y
medidas antidemocráticas al igual que la represión contra las organizaciones
sociales que luchan contra las medidas antisociales aplicadas por el Gobierno
de Rajoy, contra los sindicatos de clase, como CGT, SAT, SE UGT, CCOO y otras
fuerzas de la izquierdas como la PAH, que están en el punto de mira del
Gobierno.
Nuestra corriente IS-PSOE viene
participando en las batallas, tanto en el plano ideológico como en la lucha
social y queremos contribuir y participar en este debate, con el análisis que
aportamos seguidamente, que puede entenderse como una sincera
autocrítica, con el deseo de rectificar errores y proceder a la catarsis que el
movimiento obrero y los ciudadanos en general nos están exigiendo a las
organizaciones de la izquierda.
Tanto los defensores del capitalismo como
incluso algunos compañeros del partido que habían asumido las tesis del “libre
mercado”, intentaron durante décadas convencer a la clase trabajadora de que
era posible un “capitalismo de rostro humano”, donde se pudiesen
armonizar los derechos democráticos y las libertades de los trabajadores y los
de la burguesía. Estos planteamientos han resultado una verdadera
utopía.
Nuestro
partido cometió errores muy serios a la hora de justificar la lógica del
capitalismo, y ahora los daños económicos causados por la bancarrota de la
economía de mercado y la dictadura financiera que esconde los están cargando
sobre las espaldas de la clase trabajadora y las capas medias a través del
Gobierno del PP. Un presente y un futuro de recortes de los gastos
sociales, recortes en salarios, en pensiones y derechos conquistados, más paro y
más miseria, son respondidos a su vez con duras luchas del movimiento obrero que
se ve condenado cada vez a más paro, mas miseria y más pérdidas de derechos
laborales.
II.- SITUACIÓN INTERNACIONAL:
Con la crisis y la posterior recesión en la que estamos inmersos la realidad ha desmentido totalmente las ideas de un avance imparable en la economía capitalista. Tanto el militarismo como la opresión imperialista de EEUU se han incrementado en todo el planeta con la excusa de la lucha contra el terrorismo. Los poderosos han desatado una fuerte ofensiva por restaurar su tasa de ganancias que están afectando a los derechos democráticos de los trabajadores y los pobres.
La amenaza bélica y el chantaje de las
grandes potencias contra los países más débiles provocan que la sangre de miles de personas inocentes sea
derramada con el objetivo de mantener los beneficios de los grandes monopolios.
Las guerras, tanto en Siria, como en Afganistán, y
muchas otras, continúan; e incluso el conflicto latente de Oriente
Medio, donde el gobierno sionista de Israel, con apoyo de la camarilla de los
Halcones USA, sigue hostigando y oprimiendo al pueblo palestino, representa la
expresión cruel de la cara asesina de un sistema que antepone el lucro privado
a los Derechos Humanos y al bienestar de la humanidad.
En la primavera árabe, los levantamientos de protesta que se iniciaron en Túnez, pronto se propagaron a Egipto donde las huelga obreras y la lucha decidida de la juventud desempleada fueron la puntilla para el derrocamiento del dictador Mubarak. La lucha de masas se propagó por toda la zona, primero en Libia y demás países y ahora vemos el horror en Siria con una matanza terrible, donde los dictadores se resisten y se producen masacres contra sus pueblos víctimas también de la injerencia militar de las potencias imperialistas occidentales.
Todas esas luchas expresan la necesidad y
posibilidad de que se produzcan revoluciones pacíficas, pero son bañadas en
sangre bien por la represión de esos tiranos, que han sido mantenidos por las
potencias occidentales para saquear sus riquezas, o bien de nuevo sufren la
amenaza de invasiones por las potencias occidentales, para seguir canjeando
sangre por petróleo como lo hicieron en Iraq.
Nuestra corriente ha venido explicando que
la lucha por el socialismo no puede ser en un solo país. La problemática que
tenemos que afrontar los trabajadores y jóvenes son similares en todas las
partes del mundo. Vemos cómo el propio capitalismo ha unificado todos los
procesos sociales, económicos y políticos en un solo cuerpo internacional. La
salida a la barbarie capitalista sólo puede ser enfocada de forma
internacionalista, uniendo a los trabajadores por encima de cualquier
diferencia nacional, de etnia o religión.
III.- LA UNIÓN EUROPEA.-
Incluso en la rica Europa el capitalismo está atacando sin piedad los derechos y las conquistas sociales que la clase trabajadora a través de sus luchas hicieron posible un cierto Estado del Bienestar en los países más avanzados. Millones de personas en el conjunto del continente sufren un proceso de empobrecimiento por los recortes y la austeridad para salvar a los banqueros mafiosos. Lo tremendo de esa cuestión es que, conociendo el grado de desarrollo tecnológico y la capacidad de producción que bajo el propio sistema capitalista se ha alcanzado, podrían sentarse las bases para que la Humanidad en su conjunto pudiese disfrutar de una prosperidad y un bienestar sin precedentes.
Ahora bien, para que esa alternativa sea
posible, es absolutamente imprescindible transformar el sistema capitalista y
sustituirlo por otro modelo económico en el que las palancas fundamentales de
la economía se pongan democráticamente bajo el control de la clase trabajadora
organizada.
En agosto de 2007, con el estallido de la
burbuja financiera en EEUU, quedó demostrado que todo el circuito económico
estaba contaminado con productos tóxicos y que la relativa
estabilidad social, política, económica y militar aparente, desde la
terminación de la II Gran Guerra, había colapsado desprestigiando al sistema
“liberal capitalista”. El capitalismo herido de muerte, sin poder ofrecer a las
masas trabajo y bienestar, es la causa que está provocando un ascenso de la
lucha entre las clases abriendo un nuevo período histórico de convulsiones y enfrentamientos.
Hemos visto en Europa movilizaciones crecientes durante todo el año pasado. Primero saltó la clase obrera en Grecia, que la derecha capitalista había dejado al borde de la bancarrota y ante el brutal ataque del Gobierno con la imposición de un severo plan de austeridad, los sindicatos de la clase trabajadora declaran huelga tras huelga con millones de trabajadores saliendo a protestar y en lucha paralizando el país. Luego le tocó el turno a Portugal, al Estado español, a Chipre, donde el “corralito” saqueó los ahorros de miles de personas, de manera semejante a como los recortes y las estafas bancarias lo hacen en nuestro país con cientos de miles de familias trabajadoras.
La clase obrera se niega cada vez más a
aceptar recortes, despidos, pobreza, cuando se informa descaradamente que se
han puesto a disposición de la banca mundial más de 20 billones de dólares para
su salvamento. Millones de trabajadores están experimentando un proceso de toma
de conciencia acelerado, en base a sus propias experiencias y están modificando
sus puntos de vista, entendiendo claramente la necesidad de transformar
radicalmente la sociedad capitalista, que solo ofrece paro, guerras y
exterminio a las poblaciones que provocan un hundimiento de los pueblos en la miseria
y el paro masivo.
IV.- EL ESTADO ESPAÑOL:
El Gobierno del PP está manejando la
economía tomando medidas ultra-liberales y negociando con la Troika con el
único objetivo de garantizar que los banqueros, los capitalistas y grandes
especuladores sigan obteniendo beneficios y los ricos continúen aumentando sus
fortunas, que la evaden a paraísos fiscales. Robar a los pobres para dárselo a
los ricos, ese es el lema supremo de la acción de gobierno del PP.
En el Estado, el paro ha sobrepasado ya
los 6.200.000 parados con más del 27 % de índice de desempleados. Alrededor de
13 millones de ciudadanos se encuentran por debajo del umbral de pobreza. Cerca
de 400 familias han sufrido diariamente el desahucio de sus viviendas, y el PP
continúa sin hacer caso a la Directiva de Europa que denuncia como ilegal la
Ley obsoleta que están aplicando los banqueros.
El nivel de vida y los salarios en 2012
han sufrido el mayor retroceso desde los tiempos de la dictadura, por la
aplicación de la Contra-Reforma laboral llevada a cabo por el PP, que ha
instaurado una verdadera política de terror en las empresas, que equivale a una
férrea dictadura de la Patronal que aplica el despido libre y casi gratuito. La
Educación pública está siendo desmontada, así como la Sanidad y los Servicios
Sociales y las pensiones, que la derecha del PP está dispuesta a privatizar
llevando a la sociedad a tiempos del franquismo donde no existían derechos
básicos ni libertades políticas ni sindicales.
Nuestra corriente viene reclamando que
existe una alternativa a la podredumbre y degeneración que ofrece el
capitalismo. Esa alternativa tiene que pasar por una serie de planes que
representen una salida por la izquierda a la situación actual, donde se
contemplen en primer lugar los intereses de la mayoría que es la clase
trabajadora y las capas medias y no la banca, los monopolios
especuladores y los grandes latifundios.
Es preciso poner a debate la necesidad de
luchar por un sector financiero nacionalizado y democrático, para crear una
Banca Pública Estatal, que bajo el control democrático de los trabajadores, que
somos la mayoría aplastante de la sociedad, ponga en marcha un programa
auténticamente socialista, que fomente la producción, introduciendo
la planificación científica de los recursos productivos de forma racional y
orientada a satisfacer las necesidades sociales y no a salvar los intereses
económicos de una minoría privilegiada de banqueros y especuladores que han
estafado al pueblo.
Es posible defender los intereses de la
mayoría oprimida de la sociedad, pero para ello es necesario en primer lugar
rechazar los Pactos con la Derecha, o la trampa de un Gobierno de Concentración
Nacional, que sería atarnos al carro de la política de la derecha y
sancionar sus medidas contra los trabajadores. De lo que se trata es
de reorganizar, unir y fortalecer el movimiento obrero, tanto
sindical como políticamente para defender una auténtica política socialista.
La mayoría de los partidos de izquierdas que existen en la actualidad, se declaran partidarios de construir un nuevo modelo de sociedad, donde se contempla la República, el Laicismo y el Socialismo; varias de esas fuerzas fueron en sus inicios marxistas y revolucionarias, pero esas organizaciones no viven en el vacío y han ido cediendo ante las presiones que el sistema capitalista ejerce sobre la sociedad, teniendo efectos graves sobre todo en sus direcciones que están siempre a la derecha de sus bases. En la mayoría de los casos, los dirigentes de izquierda sindical y política han aplazado la voluntad de luchar por el socialismo. No quieren admitir que la política de pactos que ampara las contrarreformas sociales es un suicidio político y debilita la cusa de los trabajadores. Y esto vale para nuestro partido, el PSOE, en el que se ha producido una adaptación al capitalismo considerándolo como lo único posible, con todo lo que ello implica de desmovilización y justificación de políticas que van en contra de nuestra base social y de nuestros objetivos históricos.
También hemos visto cómo las cúpulas
dirigentes sindicales, excepto cuando sienten una presión fuerte desde las
bases, han tomado el camino de la menor resistencia aceptando los ajustes que
patronal y gobierno de turno plantean como “lógicos y necesarios”, para
mantener los beneficios del gran capital, creando un rechazo desde las masas
que les hace estar cada vez más desprestigiados a ojos de muchos trabajadores.
La lucha entre las clases que han querido
soslayar y aplazar muchos teóricos de la socialdemocracia, no ha sido
eliminada. Al contrario, son inevitables fuertes convulsiones sociales en el
futuro. En esos momentos turbulentos, veremos cómo nuevas capas de trabajadores
y de la juventud despertarán a la actividad sindical y política. Buscarán con
ahínco las ideas y los programas con los que dar un sentido y una perspectiva a
la lucha.
Siempre hemos repetido que los sindicatos y los partidos de la clase trabajadora no son propiedad de sus dirigentes, sino que pertenecen y se deben a la clase, por lo que los trabajadores y la juventud intentarán recuperar estos instrumentos para lo que realmente fueron creados: para luchar contra la explotación capitalista y por una sociedad mejor. En esta batalla, las ideas del verdadero socialismo serán apoyados por cada vez un mayor número de trabajadores en lucha y tendrán la posibilidad de jugar un papel determinante en el movimiento obrero y sus organizaciones.
Como trabajadores, como luchadores por un
mundo mejor, la defensa de las ideas del verdadero socialismo, lógicamente,
implican tareas prácticas, nos obligan a participar como venimos haciendo en el
movimiento real, en las luchas y en el debate allí donde se produzca. Y esa
lucha hay que llevarla adelante constantemente. Algunos miembros de nuestra
corriente Izquierda Socialista tenemos una larga historia de más de treinta
años construyendo un ala izquierda en el PSOE que conecte con el movimiento
obrero del Estado español. Ahora, la necesidad acucia y es urgente continuar en
esta línea que más tesón aún.
Como militantes de la Corriente Izquierda Socialista-PSOE hemos venido desarrollando pacientemente nuestra actividad en diferentes frentes de lucha de clases: tanto en el terreno sindical, como político, desarrollando debates sobre la situación económica, política y social, sobre la problemática de la mujer y la juventud, defendiendo el ecologismo y el medio ambiente, manteniendo un debate ideológico, con una abrumadora desigualdad de condiciones contra los defensores del sistema, criticando científicamente las ideas de la clase dominante que calaban bastante entre la juventud y la clase obrera apartándola de la lucha por el socialismo. Hemos mantenido firmes la bandera del socialismo auténtico, democrático y libre, el socialismo marxista que defendían Pablo Iglesias y los fundadores del PSOE y de la UGT, pero adaptados a la actualidad, frente al marasmo, la confusión y las calumnias con las que nos atacaban e intentaban desprestigiarnos la burguesía y sus defensores.
Los militantes de nuestra corriente somos
trabajadores asalariados, por lo que también colaboramos en la lucha sindical y
luchamos por un cambio drástico en la política de pactos sociales que han
venido practicando nuestros dirigentes de UGT y CCOO. Nuestra corriente ha
venido combatiendo y condenando la corrupción, se dé ésta en la derecha o en la
izquierda, actuando como lo hacemos como corriente crítica en los organismos
donde tenemos representación, y presentando alternativas, escritos y
mociones como puede leerse en los informes y artículos presentados permanentemente
y hechos públicos en nuestro blog. (1)
Nosotros defendemos, al igual que en el
plano político, la unidad en la acción entre los sindicatos, para avanzar en lo
que consideramos necesario, como es un sindicalismo de clase, combativo y
democrático, que se base en el método de la democracia obrera, en la
unificación de los conflictos sociales, en la práctica activa de la solidaridad
entre la clase y en la necesidad de caminar hacia la unidad para vincular las
demandas y reivindicaciones, tanto salariales, de jornada, de estabilidad en el
empleo y demás puntos de la acción sindical, con el objetivo de la lucha
política por el socialismo. Rechazamos el “sindicalismo apolítico” porque
siempre es amarillo y favorece a la Patronal que es el brazo económico del PP y
éste es el brazo político del capitalismo.
Como corriente de izquierda, como Izquierda Socialista-PSOE, hemos demostrado que podemos hacer las cosas de forma diferente a como la han venido haciendo los compañeros de la dirección de los partidos y sindicatos del “reformismo sin reformas” después de años difíciles, sin apenas recursos, en un período de enorme confusión ideológica, con las condiciones tan adversas bajo la implacable ofensiva ideológica tan enorme por parte de la burguesía y sus defensores los imperialistas. Cuando dijimos NO a la OTAN; cuando fuimos a la Huelga General del 14-D; cuando apoyamos y fuimos a la Huelga General del 29 de Septiembre, la del 14-M, en defensa de la clase trabajadora, cuando en esta lucha contra los planes de jubilación a los 67 años, hemos venido apoyando siempre a nuestra clase, movilizándonos en unidad de acción con nuestros sindicatos y la clase trabajadora en su conjunto. Cuando hemos batallado democráticamente y participando en los debates, en el interior del partido, ofreciendo alternativas programáticas y pidiendo un giro a la izquierda, hemos tenido en cuenta siempre que la lucha de clases y el despertar político de amplios sectores de la juventud y de la clase trabajadora sería inevitable.
VI.- POR UN PROGRAMA SOCIALISTA
ALTERNATIVO QUE ACABE CON LA DICTADURA DE LOS MERCADOS.
Nuestro partido, el Partido Socialista
Obrero Español tiene que realizar un cambio de rumbo programático, un verdadero
giro hacia la izquierda, para ofrecer una salida a la clase trabajadora,
que sea asumida como propia y que restablezca el apoyo y la confianza de la
mayoría de la sociedad.
Para ello defendemos las siguientes medidas:
A) Nacionalizar el sistema financiero bajo el control
democrático de los trabajadores y sus organizaciones.
Es urgente cambiar la política económica
y monetaria practicada hasta ahora. No es posible salir de la crisis
utilizando los mismos mecanismos liberales que han llevado al colapso a la
economía, por lo que la única política correcta sería utilizar todos los
recursos financieros disponibles para la creación de un “BANCO PÚBLICO ESTATAL
ÚNICO”, (con la unificación de las Cajas de Ahorros), es decir nacionalizar el
sistema financiero bajo control democrático de los trabajadores y sus
organizaciones, y poner la economía al servicio de la producción y ésta al
servicio de los seres humanos.
Es completamente inviable para cualquier gobierno
intentar convencer a la Banca Privada de que conceda créditos,
cuando el sistema está completamente colapsado, porque a los jefes y amos de la
banca privada sólo les interesa obtener gratis los fondos del Estado para
mantener sus insultantes beneficios.
Consideramos que es urgente en cuanto que el PSOE
vuelva a conquistar el Gobierno, que se decrete la expropiación de los bancos
privados, con indemnización solo en caso de necesidad
comprobada, con el objetivo de concentrar todo el crédito en manos
del Estado, para gestionarlos democráticamente entre el Gobierno, los
sindicatos de clase, los propios empleados de la Banca, y el conjunto de las
organizaciones obreras, como la mejor forma de democratizar los recursos
financieros, evitar la corrupción y la especulación y exigir el
desmantelamiento de los paraísos fiscales.
Esta política no significa, ni mucho menos, la expropiación
de los pequeños ahorradores y depositarios, sino todo lo contrario,
pues una vez nacionalizado y democratizado esos recursos dinerarios, tendrán la
garantía del Estado. De esa forma, una Banca Pública Estatal, al servicio de la
producción y gestionada democráticamente, puede establecer condiciones más
favorables para otorgar apoyos a los pequeños y medianos empresarios, a los
agricultores, a los pequeños comerciantes, a los pensionistas, a los
ahorradores, a la vez que se permitiría la inversión en los gastos sociales,
vivienda, sanidad, educación e infraestructuras públicas tan necesarias dando
empleo a millones de jóvenes y trabajadores.
De hecho, la nacionalización en la práctica de la
banca se está llevando a cabo de una u otra manera por gobiernos de todo signo
político, pero por desgracia, se está llevando a cabo poniendo los recursos
públicos al servicio de la burguesía y salvando los intereses del capital
privado. La consigna, nacionalizar las perdidas, privatizar las ganancias, es
el programa del gran capital. De ahí se desprende este ataque sin precedentes a
los gastos sociales y las conquistas históricas del movimiento obrero.
B) Por una vivienda digna y accesible a toda
la población.
Poner en marcha un plan de construcción de un millón
de viviendas sociales; municipalización del suelo urbano para liberar suelo
barato. Nacionalización de las grandes empresas constructoras, fuertemente
endeudadas, para gestionarlas democráticamente bajo control obrero. La Vivienda
es un Derecho de la ciudadanía, no un negocio de especuladores y corruptos.
Impuestos progresivos a los especuladores que poseen gran cantidad de viviendas
vacías, para forzar a sacar estas viviendas en alquiler y evitar que la
vivienda sea un medio de especulación.
El Gobierno debe desconocer el valor actual de las
deudas hipotecarias de las familias obreras, que están ligadas al valor
artificial del suelo originado en el boom inmobiliario, que se
derrumbó. Paralización inmediata de los embargos por hipotecas de
viviendas y bienes de las familias trabajadoras. Ninguna familia
obrera debe pagar más del 10% de su Salario Familiar en vivienda. Plan de
alquiler estatal con ofertas habitacionales que no sobrepasen el 10% del
Salario familiar.
El Estado procederá a la expropiación de todos los
inmuebles y viviendas abandonados, o no ocupados durante un año, o que estén
fuera de uso, para que puedan alojarse las familias sin viviendas y sin
recursos, o/y para que puedan ser usadas socialmente como centros culturales y
de ocio. La entrega y el uso de cada inmueble deberá estar controlado por la
Asambleas de peticionarios correspondientes de cada zona, con representación de
Asociaciones Vecinales, Sindicatos de clase y Vecinos que tengan solicitada
vivienda social.
C) En defensa de la enseñanza pública.
Retirada inmediata de la LOMCE. En defensa de una red
de enseñanza pública de calidad, gratuita, laica y
científica. Incorporación de los centros concertados a la Educación
Pública. Ninguna subvención estatal a la enseñanza privada. Incremento del
presupuesto educativo hasta el 7 % del PIB. Por una universidad pública y
gratuita para los hijos de los familias trabajadoras.
D) En defensa de la sanidad pública: No a la
privatización, no al copago.
Incremento de un 20 % de los presupuestos de la Sanidad
Pública, con el objetivo a corto plazo de eliminar las listas de espera y
mejorar la atención sanitaria global. Plan de inversiones en Hospitales y
medios sanitarios. No a la privatización de la sanidad pública, al recorte
presupuestario y el despido de trabajadores del sector. No al copago.
Desarrollo real de la Ley de Dependencia e incremento de los puestos de trabajo
del personal dedicado a la salud pública para atender dignamente a todos los
enfermos.
E) Luchar contra la especulación y la corrupción.
Que no se cubran las pérdidas de las empresas privadas
con dinero público. Nacionalización sin indemnización de todos los
especuladores que ahora declaran pérdidas y presentan Expedientes de Regulación
de Empleo, poniendo en peligro miles de empleos entregando esas empresas en
manos de los trabajadores con apoyo financiero y técnico por parte del Estado.
Fuerte impuesto progresivo a las grandes fortunas. Lucha contra el fraude
fiscal: expropiación de los grandes capitales que defrauden a Hacienda. Los representantes
del Partido en las Instituciones no deberán cobrar más de la media del sueldo
de un trabajador cualificado.
F) Un plan de choque de inversiones públicas.
Contra la huelga de capitales y la caída brusca de las
inversiones privadas y dado que los capitalistas españoles no invierten, se
procederá a incrementar la inversión por parte del Estado. Plan de construcción
de viviendas públicas, hospitales, centros de estudio y universidades, para dar
empleo a los millones de parados existentes y satisfacer las necesidades
sociales. Inversión en I+D+i. Introducción de la robótica y las
nuevas tecnologías para garantizar los puestos de trabajo en cada empresa que
lo requiera, bajo una planificación racional de los recursos y bajo control
democrático de la gestión por los trabajadores.
Cuando el empresario presente un ERE o el expediente
para cierre, se le exigirá que se abran los Libros de Contabilidad de la
empresa o grupo de empresa al que pertenezca. Se ejercerá el control social
para evitar el vaciamiento de los recursos financieros y demás bienes de la
empresa y se fiscalizará el funcionamiento correcto evitando los fraudes, robos
y boicoteo a la producción y la empresa será puesta bajo control
estatal para garantizar los puestos de trabajo.
G) En defensa del empleo y contra el paro.
Jornada laboral de 35 horas semanales sin reducción
salarial con el objetivo de repartir el trabajo como un bien escaso.
Para dar paso a la juventud y combatir el desempleo
juvenil, jubilación a los 60 años, con contratos de relevo y fomento del
contrato de aprendizaje.
Contra la eventualidad y la precariedad, fijo a los 15
días en puestos fijos y contratos de fijos discontinuos en puestos eventuales.
Lucha firme contra la discriminación de la mujer,
exigiendo el cumplimiento por Ley de "a igual salario, igual
trabajo", sin excepción con fuertes sanciones para los patronos que
infrinjan esa legislación.
Plenos derechos laborales iguales como ciudadanos,
tanto para los inmigrantes como los nativos, por lo que es necesario derogar la
actual Ley de Extranjería, introduciendo también cambios que favorezcan el
asilo político.
Nacionalización de las empresas en crisis para
defender todos los puestos de trabajo.
Como apoyo social de urgencia, el Estado
entregará de forma obligatoria a todo trabajador en paro que no perciba
prestación económica alguna, ayudas de emergencia en alimentos,
ropas y bonos de transporte indispensables para tener una vida digna,
comprometiéndose el trabajador a prestar servicios sociales a través
del Municipio al que sea asignado provisionalmente mientras no se le oferte
otra alternativa laboral.
El trabajo social prestado será proporcional al valor
de la ayuda recibida y se ejercerá un control público mediante la Asamblea de
barrio o zona, en colaboración con las Asociaciones Vecinales y los sindicatos
y Comités de Parados, que deberán realizar un censo para saber exactamente las
familias o personas que necesiten dichos servicios sociales básicos, que
deberán ser solicitados mediante votación positiva de la Asamblea a
la que estén inscrito, con el objetivo de erradicar de inmediato los casos de
pobreza extrema y solamente estarán exentos de prestar ese trabajo social sustitutorio
los niños, los ancianos y los impedidos por enfermedad, mediante baja médica u
hospitalaria.
Es prioritario la legalización
inmediata de todos los trabajadores que son explotados en la
economía sumergida con el mero requisito de proceder al alta de oficio a toda
persona que esté prestando servicios y no se encuentre en nómina, pasando a
contrato fijo de plantilla, con el único requerimiento de comunicar el alta al
sindicato, a la patronal y a la inspección de trabajo por parte del
trabajador afectado.
H) Por los derechos sociales y el fomento de la
actividad productiva.
Mantenimiento de los servicios de empleo dentro del
Estado. No a las ETTs. Por un puesto de trabajo o subsidio de desempleo
indefinido igual a un Salario Mínimo Interprofesional de 1.100 euros al mes a
partir de los 16 años y salario máximo de altos cargos públicos y privados que
no superen cuatro veces el salario mínimo, regulados a través del IRPF a través
de una reforma impositiva progresiva y justa.
Subida automática de los salarios igual a la subida de
coste de la vida con la introducción de la escala móvil precios-salarios, con
subidas y revisiones cada 3 meses bajo control de comités sindicales,
asociaciones de consumidores y gobierno para evitar la inflación descontrolada.
Poner la economía al servicio del ser humano y no del
lucro de una minoría, para lo cual es preciso decretar la nacionalización de la
banca y los monopolios, indemnizando a los pequeños accionistas
necesitados y poniendo estos recursos productivos bajo control democrático de
los trabajadores para impulsar la economía productiva. Con estas palancas
económicas fundamentales en poder de la sociedad, pueda llevarse a cabo un
verdadero plan que incremente la producción, cuya capacidad productiva
instalada está estrangulada en los momentos actuales en torno al 68 %.
Con el objetivo de solucionar las
necesidades de las familias de los jornaleros, campesinos pobres y
clase trabajadora en general y fomentar la creación de puestos de
trabajo, el Estado expropiará, con indemnización en casos de necesidad
comprobada, los latifundios de más de 200 Ha, para realizar una explotación en
régimen cooperativo, con apoyo técnico y financiero estatal que permitan
reformar y modernizar las estructuras agrarias, encaminadas a la
industrialización y distribución social.
Para luchar con firmeza contra el paro forzoso y
cierre de empresas, se decretará la expropiación sin indemnización por el
Estado de todas las fábricas y empresas cerradas por sus dueños o que estén
con expedientes y litigios de despidos que
tengan reivindicaciones en marcha por parte de los trabajadores,
para que sean puestas en funcionamiento bajo control democrático de sus propias
plantillas, para lo cual, el Estado deberá garantizar el salario fijado en convenio
y prestarle ayuda, apoyo técnico, financiero y plantear
una democracia real bajo control obrero.
VII.- ORGANIZAR LAS FUERZAS PARA LUCHAR POR LA
TRANSFORMACIÓN SOCIALISTA DE LA SOCIEDAD.
Este programa a favor del pueblo y de las familias trabajadoras,
es evidente que no lo van a aplicar los empresarios y la
burguesía por las buenas. Solamente con la lucha y la movilización
de masas podemos arrancar una gran parte de estas demandas. Para que sean
efectivas y llevadas a la práctica es necesario un gobierno de los
trabajadores, un gobierno PSOE e IU y otros partidos de izquierdas, que
responda de verdad a su base social, con la colaboración plena de las fuerzas
sindicales y asociaciones progresistas de consumidores y usuarios.
Para ello es preciso un reagrupamiento
de toda la izquierda, que movilice a los ciudadanos, que organice
las asambleas de barrios, al sindicalismo de clase, a la juventud, a la mujer,
al ecologismo y otras fuerzas de progreso a las que les pedimos que participen,
apoyen y exijan la aplicación y la gestión de este plan de acción. Un
movimiento que haga realidad la exigencia de Democracia Real Ya, que confluya
con las fuerzas que ha movilizado el 15-M a través de una acción sostenida de
masas.
Para ganar a la mayoría de la clase obrera para este
programa, un auténtico programa socialista, las organizaciones en su conjunto,
tanto sindicales y la izquierda en general deberían unificar sus luchas y
reivindicaciones, como insistentemente están demandando miles de activistas obreros,
juveniles, de consumidores y vecinales, que vienen tomando las
calles y plazas cada vez con más insistencia. En primer lugar, es
preciso hacer un esfuerzo por caminar hacia la unidad del movimiento de los
trabajadores por la defensa de un programa de acción común, con plena libertad
de cada organización y colectivo para defender sus planteamientos y propuestas,
y que las decisiones se tomen democráticamente en asambleas generales de cada
pueblo, distrito o comarca. En segundo lugar, los activistas de izquierda
deberían desarrollar un trabajo sistemático, de concienciación y
encuadramiento, para difundir este programa en el seno de las organizaciones
sindicales y en defensa de una acción sindical de clase, combativa y
democrática.
Mientras que tengamos el derecho de opinar y quejarnos
pero sean otros, como los grandes empresarios y banqueros nacionales y
extranjeros, los que decidan en contra de nuestros intereses, jamás habrá
auténtica democracia ni podremos avanzar hacia la superación del capitalismo: soportaremos
esta “fachada” de democracia que no es otra cosa que “la dictadura
del gran capital”. Necesitamos una democracia auténtica, una “democracia
obrera”, “una democracia socialista”, una “Democracia Real Ya”, basada
no en funcionarios y burócratas corruptos sino en el control y la gestión
directa de la población de todos los aspectos de la economía, la cultura y la
sociedad; una democracia de los trabajadores basada en la participación y el
control de la población por medio de Comités y asambleas en los centros de
trabajo y en los barrios, coordinados en el ámbito local, provincial y
nacional, donde cualquier representante o funcionario sea elegido y revocado en
cualquier momento por la población y que, en ningún caso, perciban un salario superior
al salario medio de un obrero cualificado; donde las tareas de administración y
gestión no estén confiadas exclusivamente a “especialistas” separados del
pueblo sino que sean ejercidas por el conjunto de la población.
El Socialismo es internacional o no es nada, por lo
que es preciso compartir y extender estos métodos de lucha a los países
hermanos de Europa, de Latinoamérica y resto del mundo. Los socialistas
marxistas defendemos el internacionalismo no como una buena idea sino como una
necesidad para defendernos de la crisis de capitalismo. Frente a la U. E. del gran capital, abogamos por los Estados
Unidos Socialistas de Europa como primer paso para una Confederación Socialista
Mundial, que en un plano de igualdad, colaboración y apoyo mutuo entre todos
los pueblos del planeta, supere la actual pesadilla a la que nos enfrentamos.
Con la participación activa y democrática de la
mayoría de la población en lucha por estos objetivos, estaríamos en condiciones
de avanzar hacia una sociedad verdaderamente democrática, donde, liberados de
la lucha cotidiana por la supervivencia y con los medios de producción bajo
control de la mayoría de la sociedad, los trabajadores y nuestras familias
podríamos participar conscientemente en todas las decisiones políticas,
económicas, sociales y culturales de una sociedad basada en la ética, poniendo
al ser humano en el fundamento de la economía, y ésta al servicio de la
humanidad. Consideramos que sí existe una alternativa, así como los medios para
utilizar toda la creatividad maravillosa de la que es capaz el género humano y
esa alternativa se llama Socialismo.
VIII.- MODIFICACIÓN DE ESTATUTOS: EN
DEFENSA DE LA DEMOCRACIA INTERNA.
La actual situación exige a todos los militantes y
afiliados un grado mayor de participación en el debate y en la acción, para que
puedan surgir desde las bases, las propuestas y la política que la clase
trabajadora viene reivindicando y que necesitamos dotarnos, para que una
dirección firme pueda llevarla a cabo.
Internamente se viene reclamando por algunas
corrientes un Congreso Extraordinario que permita el profundo cambio
democrático interno y la formulación de un proyecto político de izquierdas más
acorde con las necesidades.
Para ello necesitamos profundizar en la democracia interna
para que los afiliados tengan mejores oportunidades de expresarse en plena
libertad, puedan canalizar adecuadamente sus opiniones, inquietudes
y propuestas críticas como se demanda a todos los niveles de la organización.
Para mejorar el funcionamiento interno proponemos:
1) Abrir puertas y
ventanas para que entre el aire fresco.
2) Implantar las
primarias a todos los niveles.
3) Desarrollar
completamente la democracia interna.
4) Garantizar la
libertad de expresión plena.
5) Promover la elección y
revocabilidad de los cargos desde las Asambleas de Base.
6) Las Asambleas serán
soberanas y propondrán a los candidatos con plena libertad.
7) Garantizar la
participación de todos los afiliados en igualdad de condiciones, introduciendo la
rotación y un máximo de dos mandatos en los cargos.
8) Los representantes
elegidos para las instituciones cobrarán el salario medio de un trabajador
cualificado.
9) Medidas
contundentes contra el fraude y la corrupción, con tolerancia CERO exigiéndonos
a todos un comportamiento ético de acuerdo con los principios
del genuino socialismo democrático que defendió y practicó Pablo
Iglesias.
10) Un
partido más abierto, donde la democracia interna funcione intensamente.
11) Una
mayor capacidad de decisión de su amplia base militante haciendo participes a
simpatizantes y ciudadanía progresista.
12) Un
programa bien identificado con nuestros principios, trayectoria,
proyecto orientado hacia la mayoría social “de izquierdas” que conforman las
clases populares (clase obrera y capas medias, profesionales, funcionarios,
autónomos, etc).
13) Un
partido transparente, responsable ante la sociedad, que rinda cuentas del
cumplimiento de sus programas y compromisos, y de la labor de sus
cargos públicos.
14) Un
partido plural, más dinámico y donde las ideas emanen del debate
(democrático, abierto y transversal).
15) Un
partido en el que sus dirigentes sean elegidos directamente por las bases y
accedan a los cargos en función de su esfuerzo y capacidad, con un compromiso
social y político constatado en la fidelidad a los ideales socialistas.
16) Un
partido coherente, con un comportamiento consecuente entre lo que se piensa, se
promete y lo que se hace. Y que acentúe la efectividad de los mecanismos de
exigencia de responsabilidades políticas mediante la revocabilidad de los
cargos.
17) Un
partido rejuvenecido, con procedimientos de democracia directa (primarias,
listas abiertas) para la elección de candidatos a cargos orgánicos e
institucionales.
18) Con
limitación de mandatos, incompatibilidades y garantizando la representación de
su pluralidad en los órganos de dirección.
Consideramos que Sí existe una alternativa
para utilizar toda la creatividad maravillosa de la que es capaz el género
humano y esa alternativa se llama SOCIALISMO por lo que merece la pena seguir
luchando para la conquista de un programa verdaderamente socialista que ponga
las bases para la transformación de la sociedad.
¡¡POR LA
DIMISIÓN DEL GOBIERNO DEL PP¡¡
¡¡ELECCIONES
ANTICIPADAS YA¡¡
¡¡ORGANIZATE Y
LUCHA POR ESTE PROGRAMA SOCIALISTA¡¡
¡¡POR UN
GOBIERNO PSOE-IU Y DEMÁS FUERZAS DE LA IZQUIERDA CON UN PROGRAMA AUTÉNTICAMENTE
SOCIALISTA¡¡
COORDINADORA
PROVINCIAL.
IZQUIERDA SOCIALISTA DE MÁLAGA-PSOE
Solicita nuestro programa al correo de
abajo y te lo remitiremos de forma gratuita:
(No olvides poner en asunto la palabra “Programa
Alternativo”.
· Para
ponerte en contacto con nuestra corriente:
COORDINADORES DE IZQUIERDA
SOCIALISTA-PSOE.
COORDINADOR DE ANDALUCIA: José Antonio Pérez Tapias.
Tl. 629.232.886 jptapias@ugr.es
COORDINADOR DE ANDALUCIA: Miguel
Manzanares:
TL: 690.852.812.
e-mail: mdocesal@gmail.com
MÁLAGA: Pepe Martin.
Portavoz. Tl. : 687.666.009 e.mil: mcbustam@gmail.com
MALAGA: Antonio Hijano:
Coord.Axarquía. Tl : 647,918.315 tonihijano@hotmail.com
MALAGA: Paco Vela:
Coordinador Provincial: 657.860.806 macadamia07@gmail.com
IS-PSOE JUVENTUD.
Javi Yuste.
Tl: 686.196.707: javiyuste1980@hotmail.com
Correo de la Coordinadora: ispsoeandalucia.malaga@gmail.com
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