15 de junio de 2020

¿NAZI-FASCISMO, DEMOCRACIA BURGUESA O DEMOCRACIA SOCIALISTA?


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¿QUÉ ES EL NAZI-FASCISMO?

Existen muchas definiciones de lo que es el “nazi-fascismo”, entre otras esta que dice: “Nazi-fascismo es el CAPITALISMO concentrado y químicamente puro que aplica un sistema sociopolítico y económico militarista, totalitario, nacionalista, autoritario, antidemocrático, antisocial, racista, corporativista, hipócrita, golpista, machista, dictador, xenófobo… que elimina las libertades Civiles y los Derechos Humanos cuando llegan al poder”.

El nazi-fascismo es MILITARISTA y adopta por la fuerza bruta de las armas el control absoluto de los medios de comunicación, la educción y la economía, para divulgar y promover una ideología ÚNICA.

El nazi-fascismo es TOTALITARIO y a través del Estado y su aparato represivo de las fuerzas armadas, domina todas las áreas de la vida privada y pública, implantando férreos controles militares en todos los ámbitos de la sociedad.

El nazi-fascismo es NACIONALISTA y ultra, siendo esa la  ideología que imponen por las bravas en defensa de una UNICA NACION, persiguiendo hasta su exterminio a las diversas nacionalidades, lenguas e incluso culturas, que encuentren en los territorios conquistados por la fuerza de las armas.

El nazi-fascismo es AUTORITARIO y personalista,  implantando el culto a la personalidad de un líder ÚNICO, presentándolo como carismático, sometiendo al pueblo a una sola creencia religiosa, que ellos controlan y dominan con su ideología obligatoria.

El nazi-fascismo es ANTIDEMOCRÁTICO pues ilegaliza, y aplasta a los partidos y organizaciones de izquierdas, suprimiendo incluso la Democracia Burguesa, es decir, prohíbe toda oposición a su régimen aplicando la pena de muerte.

El nazi-fascismo es ANTISOCIAL, pues incluso rechazan la amable careta del régimen de “democracia  burguesa”, que en su fase de crisis agónica, tiende hacia la Autarquía, intentando derribar gobiernos de izquierdas, de centro e incluso de derechas, para tomar el poder.

El nazi-fascismo es RACISTA porque discrimina y desprecia a los grupos étnicos distintos a ellos, expandiendo el sentimiento de odio violando el Artículo 1) de la Convención Internacional sobre eliminación de toda forma de discriminación racial, que dice: RACISMO ES “”toda distinción, exclusión, restricción o preferencia basada en motivos de raza, color, linaje u origen nacional o étnico, que tenga por objeto o por resultado, anular o menoscabar el reconocimiento, goce o ejercicio en condiciones de igualdad, Derechos Humanos y Libertades Fundamentales, en las esferas política, económica, social, cultural o  de cualquiera otra esfera de la vida pública”.

El nazi-fascismo es CORPORATIVISTA y somete al arbitrio de un PARTIDO dictatorial ÚNICO y un sindicalismo vertical y ÚNICO, los intereses laborales, económicos, sociales y culturales de toda la población, como sufrimos los trabajadores bajo la Dictadura del General Franco.

El nazi-fascismo es HIPÓCRITA pues esconde bajo su discurso “salvador” dirigido a engañar a las masas populares, la Dictadura de los Capitales, que lo financian y a los que defienden y sirven en última instancia, pregonando en su discurso que quieren salvar a “España Primero”, aunque los españoles se mueran de hambre.  

El nazi-fascismo es GOLPISTA y se permite la participación en el juego electoral para crecer, pero en cuanto que existe un Gobierno de izquierdas, elegido por el pueblo, lo llaman “ilegítimo” y lo amenazan para destruirlo y tomar el control del Estado, en beneficio de las camarillas de banqueros, capitalistas, especuladores y corruptos, que les amparan, protegen y financian, como históricamente ocurrió con los golpistas Franco, Pinochet, Videla y hasta más de 50 en el siglo XX en diversos países del mundo.  

El nazi-fascismo es MACHISTA, pues tiene una concepción “patriarcal” de la sociedad y defiende la “”superioridad natural del hombre”” contra la mujer, manteniendo comportamientos discriminatorios y de desprecio a los movimientos feministas y a la mujer trabajadora, que la quieren “sumisa, con la pata quebrada y en casa”.  

El nazi-fascismo es DICTADOR contra los débiles y servil ante la clase capitalista/imperialista dominante. Con su puño de hierro envuelto en guante de terciopelo, calumnian, envenenan con odio a las masas y a sus representantes. Nunca han condenado el Golpe Militar de  Franco y coquetean con las fuerzas militares, para conquistar el poder, despreciando el Feminismo, el ecologismo, y demás fuerzas sociales, pues con sus mentes estrechas y maquiavélicas aspiran al Poder Dictatorial, negándose a admitir ningún otro gobierno que no obedezca sus órdenes.

El nazi-fascismo es XENÓFOBO porque rechaza a los “extranjeros pobres” y sus organizaciones, a la vez que  quiere poner todos los medios posibles para luchar contra los “inmigrantes pobres”, pero hacen llamadas a los “extranjeros Ricos” para que nos visiten como Turistas y como inversores capitalistas, a la vez que saludan sumisamente a los líderes mundiales, tanto a Trump, Bolsonaro y demás Capos de la ULTRADERECHA IMPERIALISTA.  


¿QUÉ ES LA DEMOCRACIA BURGUESA?

 RAJOY, EL EMBUSTERO – azperiodistas
LA DEMOCRACIA BURGUESA es el método amable de gestionar el sistema capitalista, bien de forma liberal, conservadora o mixta (A veces con la ayuda de la Socialdemocracia y otros grupos políticos),  en contraposición al método brutal y sanguinario del nazi-fascismo, que lo aplican en última instancia, cuando se sienten incapaces de vencer en las urnas. Intentan un equilibrio para amortiguar la lucha entre las clases como forma básica de la incorporación de las masas en el organismo social, pero subordinadas a una dirección política neoliberal/conservadora, que no es ningún modo de autodeterminación directa del pueblo, como se viene autodefiniendo por sus defensores.

La Democracia burguesa necesita al Estado Burgués que es el aparato que utiliza la clase dominante para defender sus intereses capitalistas de clase, sus beneficios y sus privilegios, y se compone de “hombres armados en defensa de la propiedad privada”, como dijo Marx, para explotar y mantener sometida a la clase trabajadora, a la cual engañan con demagógicos discursos y de la que  obtienen las “plusvalías”, que es de donde extrae el Capitalista sus Beneficios.    

La Democracia burguesa es el sistema económico y social basado en la propiedad privada de los medios de producción, defendiendo y anteponiendo la importancia del lucro privado del capital, a los salarios y al bienestar de la población, que son los verdaderos generadores de riqueza y plusvalías, dejando las asignaciones de las inversiones y recursos, a los mecanismos salvajes del mercado, en vez de producir para cubrir las necesidades humanas. Las burguesías capitalistas son los defensores del beneficio del Capital anteponiéndolos al bienestar e incluso la vida de las personas.

La Democracia burguesa y su ESTADO impiden en realidad que los gobiernos  puedan gobernar libremente a favor del pueblo, porque son los poderes financieros, los mercados, las multinacionales y sus banqueros, los llamados “Poderes Fácticos, los que marcan la hoja de ruta y ese Triunvirato de fuerzas aliadas (Capital, Ejército y Clero)”, son los que marcan en realidad la gestión de cualquier gobierno, se llame éste de  derechas, de centro o incluso de izquierda, mientras que exista el sistema capitalista.

La Democracia burguesa significa mantener los privilegios de los más ricos, incrementando todo lo posible las ganancias y la acumulación de capitales, por lo que mientras que exista el sistema capitalista y no sea superado por el genuino socialismo democrático, el poder económico mandará sin sentarse en los Consejos de Ministros; En la actualidad, la radicalización de las fuerzas de derecha, extrema derecha y ultraderecha (C`s, PP y VOX),  se han tirado al monte y actúan de forma antidemocrática.

La Democracia burguesa no puede resolver sus tremendas contradicciones, principalmente la permanente concentración de la Propiedad Privada en potentes multinacionales imperialistas que se disputan la hegemonía mundial y chocan con las fronteras nacionales: ambas cuestiones se han convertido en un freno absoluto y una trampa mortal, que impiden el desarrollo de las fuerzas productivas.

La Democracia burguesa es un sistema que está obsoleto, enfermo y agotado con sus crisis cíclicas permanentes, cada vez más profundas. La polarización entre derechas e izquierdas sigue creciendo que es lo que se esconde en ese agrio debate político recurrente que se ha radicalizado entre derechas e izquierdas, haciendo desaparecer el Centro, que queda como la “línea imaginaria” que divide al gran círculo escindido en dos sectores enfrentados, el mundo del Capital y el mundo del Trabajo, que demuestra la agonía del capitalismo en su crisis económica en el plano mundial  y el agotamiento del Pacto de la Transición de 1978 en nuestro país.    


¿QUÉ ES LA DEMOCRACIA SOCIALISTA O SOCIALISMO DEMOCRÁTICO? (*)
Posición de IZQUIERDA SOCIALISTA–PSOE sobre la República ...

La Democracia socialista representa la ALTERNATIVA a los modelos antes descritos, pero para ello necesitamos una Democracia plena, participativa y completa que solo será posible en base al genuino socialismo, cuando la ciudadanía lo decida, implantándose la Democracia Socialista  gestionada por medio del voto directo, incluso telemático, en todos los estamentos de la sociedad, avanzando hacia la planificación científica de los recursos productivos de las palancas fundamentales de la economía puestos al servicio de la sociedad en su conjunto.

El Socialismo democrático representa un paso más a la izquierda que la Socialdemocracia actual, que ha fracasado al no ser capaz de aplicar las reformas prometidas, tanto en Europa como en el resto del mundo,  pero sin llegar al estalinismo que fracasó en sus formas y en el fondo. Nuestro modelo aboga por un sistema socioeconómico, político y social  internacionalista y basado en el socialismo científico, aunque no exigimos una rigidez y uniformidad de enfoque, como hacen los sectarios, pues nos reclamamos defensores de la filosofía materialista dialéctica como el método marxista más apropiado para la defensa de la clase trabajadora y el análisis de la sociedad para superar el capitalismo, por lo cual debemos convencer democráticamente a la clase trabajadora y capas medias, para que sea la voluntad del pueblo trabajador, expresada con su voto, pero con su participación en sus luchas sociales pacíficas y organizadas, los que decidan el camino, el cómo y el cuándo quieren los cambios del modelo que necesitamos y al que aspira la clase trabajadora y los sectores menos favorecidos de la sociedad actual, para transformarla.

La Democracia socialista busca la colaboración y el entendimiento con organizaciones de izquierdas que se inspiren en principios éticos e incluso religiosos como la Teoría de la Liberación y cualquier organización, sindical, social, como ecologistas, feministas, pensionistas, etc… para modificar la gestión económica capitalista, basándonos en la gestión social y la administración colectiva o estatal de los grandes medios de producción, distribución de bienes y servicios esenciales que deben ser PÚBLICOS.

El Socialismo democrático, en oposición radical y a diferencia del Nazi-fascismo explicado anteriormente y a esa Democracia Burguesa en descomposición, nos declaramos PACIFISTAS y NO MILITARISTAS.

La Democracia socialista es PLURALISTA, FEDERALISTA, LAICA, REPUBLICANA, COOPERATIVA Y SOLIDARIA, No somos Totalitarios, ni radicales, ni violentos como nos acusan los nazi-fascistas, sino que aceptamos la voluntad democrática del voto popular expresado libremente en las urnas.   

El Socialismo democrático, NO es Nacionalista, sino INTERNACIONALISTA y trabajaremos por la Federación Socialista Europea de los pueblos libres, orientados hacia la futura CONFEDERACIÒN SOCIALISTA MUNDIAL, a la que en un plano de colaboración, solidaridad y apoyo mutuo, decidan los pueblos democráticamente.

La Democracia Socialista, NO es antisocial ni intransigente, como otros grupos y partidos de las derechas,  sino SOCIALISTA consecuente y queremos una sociedad mejor para toda la humanidad, pues nuestra aspiración es “la completa emancipación de la clase trabajadora”.  

El Socialismo democrático, NO es racista sino que respetamos y acogemos a todas las ETNIAS y pueblos por igual, tratando a todas las personas con los mismos derechos.  

La Democracia Socialista, NO es “corporativista”, sino COOPERATIVISTA y partidaria de la Economía Social Autogestionaria, bajo el control social de la clase trabajadora organizada y aspiramos a implantar el método Democrático a todos los niveles, para gestionar la sociedad, con el objetivo de erradicar la corrupción y los despilfarros.   

El Socialismo democrático, NO es hipócrita, sino que defendemos y buscamos la verdad social en BENEFICIO DEL BIEN COMÚN, aspirando a “la abolición de todas las clases sociales y su declaración y conversión en una sola clase de trabajadores, dueños del fruto de su trabajo, libres, iguales, honrados e inteligentes”, como consta en la Declaración de Principios Ideológicos del Socialismo. (*) 

La Democracia socialista, NO es golpista, reclama la Memoria Histórica, Verdad, Justicia y Reparación, así que condena el método del Golpe de Estado, las dictaduras y las guerras, que utilizan algunos partidos como método para tomar el poder, sean del signo que sean.  

El Socialismo democrático NO es machista, sino  FEMINISTA,  porque defendemos la igualdad entre mujer y varón, queremos acabar con el Patriarcado y ayudar a que la mujer luche por su liberación, que será también la de la clase trabajadora a la que mayoritariamente pertenecemos.

La Democracia socialista, NO es xenófoba, sino que defendemos una sociedad donde avancemos hacia la IGUALDAD, al contrario que los nazi-fascistas que rechazan a los inmigrantes y las etnias diversas, sobre todo a los más  pobres.

El Socialismo democrático, NO es dictador y rechaza cualquier tipo de dictadura,  porque nos basamos y queremos una sociedad PROFUNDAMENTE DEMOCRÁTICA, donde los trabajadores elijan a sus representantes, para la Administración del Estado, e incluso practicar la democracia plena en el seno de las empresas, para elegir a los gestores y representantes mediante el voto de las plantillas.

La Democracia socialista es ECOSOCIALISTA y ante el debate abierto sobre el CAMBIO CLIMÁTICO y los efectos tan nocivos y devastadores de la contaminación, causada por la depredación del planeta bajo el Capitalismo, cuyas consecuencias se han convertido en un peligro para la vida en este planeta Tierra, necesitamos declarar la EMERGENCIA CLIMÁTICA, pues está en riesgo la vida de millones de seres humanos, lo cual pone en evidencia la gravísima situación a la que este modelo corrupto de los capitales nos ha abocado. La causa fundamental de esta problemática es el control de la economía mundial por un puñado de potentes monopolios imperialistas, que anteponen el lucro privado y los intereses de una ínfima minoría de accionistas archimillonarios, a los intereses de 7.700 millones de habitantes que poblamos el planeta, por lo cual, esto indica la necesidad de continuar la batalla por un mundo mejor, que garantice la vida de las personas a escala Internacional.

El Socialismo democrático, NO es partidario de pactos con las Burguesías porque siempre han fracasado y nos han defraudado, por lo que defendemos un SOCIALISMO DE ALIANZAS DE IZQUIERDAS,  para luchar por la Igualdad y el bienestar de las personas, porque  como dice el Articulo 1) de los DDHH “Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros”, declaración violada permanentemente por todas las instituciones burguesas capitalistas y nazi- fascistas, tanto mundiales como en los Estados nacionales respectivos.   

Concluyendo: En cualquier democracia sana, sea ésta Burguesa o Socialista, seguiremos defendiendo nuestros ideales y principios como la solidaridad, la pluralidad, la participación, la cooperación y otros valores sociales que sirvan a la ciudadanía, donde deben respetarse todas las ideologías, sean éstas de Derechas, de Centro o de Izquierdas, sean nacionalistas, o defiendan cualquier otro modelo ideológico, respetuoso con la VOLUNTAD DEMOCRÁTICA DEL PUEBLO EXPRESADA EN LAS URNAS, por métodos pacíficos, pero no debieran tener cabida esos grupos Neo-fascistas, ni ningún otro tipo que hagan apología del Golpismo,  de la  Violencia Terroristas, o del Terrorismo de Estado, que debieran ser ilegalizados, si en verdad queremos una vida democrática y pacífica para resolver las  contradicciones a las que nos somete esta desigual e injusta sociedad capitalista actual, para lo que  proponemos llevar a cabo una batalla seria por más democracia, más participación y contar siempre con el voto, la inteligencia, la voluntad y el esfuerzo de la clase trabajadora y las capas medias, en la ardua tarea  por la transformación socialista de la sociedad.   

JOSÉ MARTÍN RODRÍGUEZ.
COORDINADOR DE COMUNICACIÒN.
IZQUIERDA SOCIALISTA DE MÁLAGA.
PSOE DE ANDALUCIA.

(*) Si todavía no conoces el programa alternativo de I.S. aprobado en la Asamblea de Andalucía, puedes solicitarlo gratuitamente al correo de abajo, poniendo en asunto: ”MEMORIA ASAMBLEA”




   

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