Si analizamos el nivel cultural de los dirigentes políticos que dicen representar al pueblo en el Parlamento español, comparándolo con cualquier época histórica, incluida la llamada Transición que engendró el hibrido del Pacto del 78, donde permaneció un remanente de la cultura franquista que “vuelve a amanecer”, el nivel cultural ha descendido al aplicarse una especie de “política del cangrejo”, empujadas por algunas fuerzas reaccionarias partidarias del pasado y utilizan el llamado cretinismo parlamentario.
Muchas personas a las que nos gusta seguir los debates en los medios de
comunicación, soportamos con horror los insultos, las descalificaciones
personales, las groserías, los malos modales, el odio y la violencia verbal que
vomitan algunos, cuando por otra parte,
la juventud y el pueblo en general, podemos constatar que existen generaciones
con un alto grado de cualificación donde prácticamente el analfabetismo parecía
estar erradicado, pero existen los “analfabetos funcionales en la política”.
También existen en realidad varias culturas, pero para facilitar esta
crítica la vamos a contemplar agrupándolas en dos principales. La Cultura
Progresista y la Cultura Reaccionaria.
Esta última sigue siendo la predominante y representa a la clase Burguesa
más reaccionaria, que educa a los ciudadanos para creer en la ficción y en las
religiones, que chocan muchas veces con la ciencia, porque se soporta sobre una
base metafísica, a veces no material donde están impregnadas de dogmas y
creencias absurdas que no soportan la menor prueba concreta de la
comunidad científica.
Eso equivale a enseñar desde la infancia, a creer en lo que no se ve, sea mentira o sea
verdad. Con esa técnica, la burguesía se
permite servir sus intereses privados, a base de la “alienación mental” para su
provecho de clase y perpetúa la explotación del asalariado y los pobres, favoreciendo al capitalismo.
A la burguesía no le interesa enseñar a pensar, sino enseñar a obedecer.
La cultura obrera, que como explicaba Largo Caballero “es una lucha permanente
contra la ignorancia impuesta por la clase dominante”, debiera basarse en el
conocimiento científico, es decir, que tenga su soporte en una filosofía basada
en el materialismo dialéctico, que nos enseñe a buscar la verdad ética para
mejorar la humanidad como colectivo, rechazando el individualismo, la opresión,
la explotación, el engaño y los valores impartidos por la clase de los poderosos
y corruptos.
A la moral hipócrita de la burguesía tenemos que contraponer la ética
socialista que es la filosofía más adecuada para la clase trabajadora.
Pero bajo el sistema capitalista no se puede aplicar una educación
científica global porque los poderes fácticos se oponen.
La clase dominante, a través de su brazo ideológico que es la Iglesia
Católica y las miles de otras religiones existentes en el planeta, se oponen a
que se tomen las medidas adecuadas para el progreso de la colectividad, porque están defendiendo intereses privados.
No pueden defender lo público porque contradice su propia filosofía. No
defienden una educación, laica, científica, pública, igualitaria y de calidad,
porque necesitan fomentar las élites formadas por los retoños de la burguesía
para perpetuar su dominio de clase.
Es imposible que la burguesía pueda defender una política social
solidaria que satisfaga las necesidades humanas porque perjudica su móvil, que
no es otro que el lucro privado, dominado por una minoría de grandes magnates
financieros, lo sepan o lo oculten.
Al impartir el conocimiento bajo un cierto método y con unos objetivos
concretos, el pensamiento de algunos economistas burgueses y otros técnicos-
especialistas, se encuentra deformado.
Por ejemplo, en su modelo económico “liberal”, que ha colapsado, no se estudia para que la producción de bienes
y servicios esté encaminada a satisfacer las necesidades de la población, sino
para el lucro privado, siguiendo la lógica del
beneficio capitalista.
Los que entran dentro de esa categoría profesional, son unos simples
“mercenarios”, lo sepan o no, que actúan por ignorancia o hipocresía en defensa
de los intereses de sus amos los capitalistas, o de su propio beneficio si son
de mentalidad capitalista, pero no del
pueblo trabajador.
Están al servicio de los intereses de quien les paga a sabiendas que con
sus planteamientos y sus técnicas perjudican a la clase trabajadora y a los
pobres, depredan el planeta Tierra y fomentan la corrupción que representa la
explotación y la opresión de los pueblos.
Nos han bombardeado con la propaganda permanente diciendo que la
“economía de mercado” es la más eficiente. ¿Para quién? Es siempre más
eficiente para los que tienen recursos. Hagan la prueba de ir a cualquier
mercado sin dinero y comprobarán la “libertad de la que gozan”.
En el mercado se ejerce la “Libertad del Poderoso”, contra el débil, que
es el obrero, el asalariado, el pobre, que pierde su libertad cuando el patrón le
arranca la plusvalía, o cuando lo manda al paro, y que no se siente fuerte, porque está desorganizado y desunido, viéndose
sometido, tanto por la cultura de la clase dominante como por la fuerza de los
poderes instituidos.
En la Unión Europea y demás grupos imperialistas, la puesta en marcha de
una serie de políticas a base de Directivas emanadas de grupos financieros, que
actúan al margen del control político, se legisla en base a la “Dictadura del
Capital”, bajo la máscara aparente de la “Democracia Burguesa”, cuyo fin concreto es la defensa de los
intereses de esa “Europa de los Mercaderes”, que cada vez produce más
desigualdades entre países ricos y países pobres, y también, entre persona
Ricas y Pobres.
Esa Europa de los Mercaderes
Mafiosos, donde se protege y ampara a la corrupción, y también a países como los
regímenes cleptocráticos de Hungria, Polonia, etc, que además promueven el protofascismo
donde intentan gobernar o donde gobiernan, siendo tolerados y amparados por
todos los demás Gobiernos que no rompan con ellos.
También en el Estado español, por el remanente de cultura fascista
imbuida por el régimen de Franco, que
defienden tanto PP como VOX, se han
quitado la careta e imparten sin tapujos la ideología franquista de la que son
legítimos herederos y que hemos venido denunciando desde Izquierda Socialista.
Esos modelos han fracasado porque nos prometieron que la U.E. sería muy
beneficiosa y que el comercio iba a favorecer el desarrollo y la igualdad, pero
todo eso ha resultado una enorme estafa para la clase trabajadora y en cierta
parte, ha sido muy beneficiosa para la burguesía, en cuanto que ha potenciado el
desarrollo y acumulación de riquezas para los mismos de siempre.
Aumentan las concentraciones tendentes al oligopolio, en la banca, en los
grandes capitales y los grupos de presión de los imperialistas europeos,
amasando enormes fortunas, “presuntamente” evadidas a Paraísos Fiscales, aunque tengamos una Justicia muy corta de
vista, pues desde el “Campechano que ha perdido
su e-Mérita Corona”, pasando por la caterva del pútrido ranero del PP y sus
“ventrílocuos de la estafa y el compadreo”, que han robado y perjudicado de
forma escandalosa los intereses de los ciudadanos, todo “presuntamente”, siempre
se negarán a devolver lo que han medrado injustamente, por lo que queda un
único recurso: La incautación de lo robado al pueblo.
La U.E ha entrado en esta recesión “Económico-Pandémica” que está siendo
y será muy dura. En los últimos años, según la “estimación realizada por
Eurostat, el número de parados en marzo 2007 estaba en 17 millones de personas
para el conjunto de la Unión”.
“La tasa de paro de la Eurozona se situó el pasado mes de mayo (2021) en
el 7,9 % (…) La oficina estadística comunitaria calcula que 15.270.000 de personas
carecen de empleo en la U.E. en mayo de 2021 (…) (Europapress.es 1/721).
En toda la Eurozona se contabilizan 1.730.000 parados MENOS que en 2007,
mientras que en el Estado español se contabilizan 1.672.339 parados MÁS, pero
las causas son contradictorias, ya que las izquierdas responsabilizan de esta
situación a las derechas y viceversa, pero en realidad, eso demuestra que
existe un sistema capitalista hibrido, con reminiscencias franquistas que no
funciona y que pone en tela de juicio el modelo económico del Pacto de 1978 que
reclama una reforma hacia el Federalismo o las masas en acción empujarán hacia
la Revolución.
Este año 2021 el número de parados en el Estado español, alcanza la cifra de 3.614.339 personas que son
en la actualidad el número de trabajadores y trabajadoras que buscan
desesperadamente un puesto de trabajo sin posibilidad de encontrarlo en el
corto plazo, como se especifica en el siguiente párrafo.
La tasa de desempleados en España en 2007 estaba en el 8,8 % (EPA) con
1.942.000 parados. Pese al crecimiento de empleo que subió en 166.911 personas
al 30-6-21, todavía la tasa de paro está en 3.614.339 parados, más los que
quedan en ERTEs, lo cual es una barbaridad y un verdadero escándalo público.
Los niveles salariales están bajando en términos relativos con un
empobrecimiento brutal de las masas a base de los recortes sociales de la
Patronal, que son evidentes.
El sistema capitalista ejerce una tremenda violencia contra los
trabajadores, cuando vemos que el paro golpea sobre todo a los jóvenes menores
de 25 años, siendo el paro juvenil muy traumático ostentando el Estado español
la tasa más catastrófica de toda la Eurozona, encabezando la lista de paro
juvenil con el 37,7 % de los menores de 25 años, más del doble que en Europa.
Para salir del atolladero en el que nos ha metido el “libre mercado”
capitalista, no queda otro remedio que luchar en líneas de clase para avanzar
hacia un nuevo modelo de sociedad, donde se pueda planificar la economía.
Pero como no se puede planificar lo que no se controla y no se puede
controlar lo que no se posee, lo natural es que se plantee claramente sobre la
mesa un proyecto genuinamente de izquierdas, donde se contemple la nacionalización de los
sectores básicos de la economía, entre ellos la banca, las eléctricas, los monopolios y los latifundios, indemnizando
en casos de necesidad comprobada, para planear de manera científica y armoniosa
el futuro de la producción y la distribución de bienes y servicios.
Con un modelo cultural diferente, con sindicatos fuertes y combativos,
con una Democracia Participativa y Ética y una economía basada en el Socialismo
Científico (*), al servicio de la humanidad, trabajando todas y todos,
produciríamos más y si a su vez se repartiría mejor el fruto del trabajo
colectivo; Ese si sería el inicio de la salida de la recesión
con el rumbo puesto hacia un nuevo modelo de sociedad, que deje en el basurero
de la historia el corrupto modelo capitalista que está obsoleto y ha colapsado
corroído por la especulación, la corrupción y sus propias contradicciones.
Si eres partidario de la Cultura Progresista, organízate y lucha con
nosotros por cambiar la sociedad, porque otro mundo es posible, pero con el
Socialismo, poniendo al conjunto de los trabajadores en acción en una batalla
firme contra el Capitalismo y la corrupción.
EQUIPO DE COMUNICACIÓN.
IZQUIERDA SOCIALISTA DE MÁLAGA-PSOE
(*) Si todavía no conoces el borrador de Enmienda a la Totalidad que
estamos defendiendo, puedes solicitarlo gratuitamente al correo de abajo:
Ispsoeandalucia.malaga@gmail.com
PD: Cualquier comentario, aportación o crítica, serán bienvenidas y puedes
enviarlo al correo de arriba.
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