¡SI QUIERES LA PAZ, LUCHA
POR EL SOCIALISMO!
La lucha por la hegemonía mundial de los
4 bloques imperialistas principales (EEUU
y Europa y sus satélites por una parte y por la otra Rusia, China, India
y sus zonas de influencias ha llegado a un punto crítico, colocando al sistema
capitalista ante la crisis más grave desde la Segunda Guerra Mundial.
Las
perturbaciones económicas que se siguen agudizando a escala internacional, el
caos de la guerra de Rusia con la OTAN que destrozan Ucrania, los conflictos de
la inflación galopante en todos los países capitalistas, han abierto un
peligroso periodo de turbulencias en la economía mundial tanto en Occidente como en Oriente, afectando a los
países de Europa, pero con más virulencia a los de África y los más empobrecidos, donde las hambrunas y
la mortandad causan estragos.
La clase dominante siempre había
manifestado una firme confianza en que todos los problemas de la economía y de
la sociedad, podrían ser regulados y manipulados, hablando siempre de las
crisis como una oportunidad, pero algunos manifiestan ciertas dudas, de si en
realidad, todos los analistas de la economía, con sus gobiernos y asesores,
puede que no estuviesen tan acertados en sus perspectivas y empieza a cundir el
pánico.
Aquella mano invisible de Adam Smith, en
la que confiaban, donde el “libre
mercado” y la “competencia”, producirían el reajuste de la economía y la
regulación de la oferta y la demanda,
alentando la inversión y el funcionamiento de la economía que se
reanudaría, aunque fuese apoyándose en maniobras monetarias y fiscales de los
Bancos Centrales, les está resultando demasiado arriesgado y todas las
ilusiones que habían sembrado, con el aparato de propaganda a su servicio,
están siendo totalmente destrozadas.
El anterior período de Capitalismo
Liberal e ilustrado de permanentes reformas, aunque éstas sufrieran la presión
de la lucha de clases, se ha convertido ahora en un periodo de trastornos y
crisis en las relaciones de clases e internacionales, con los “embargos mutuos”
de cierre de fronteras, que ponen en peligro el ritmo deseado para la obtención
de los beneficios esperados y si no termina pronto la Guerra entre Rusia y la
OTAN, que están destrozando a Ucrania y llevando a cabo una verdadera
carnicería, la recesión y el malestar podrían generalizarse y las masas
empiezan a despertar, porque comienzan a faltar los alimentos y recordemos el
dicho que “la revolución es una cuestión de falta de PAN”.
La situación de Ucrania se complica cada
día más, pues ese país está dirigido por un Gobierno Burgués y reaccionario, al
servicio del bloque imperialista dominado por la OTAN, que tiene prohibido los
partidos socialistas y demás izquierdas, ataca a los sindicatos obreros, oprime
a la minoría ruso/parlante y al pueblo gitano, además de basarse en milicias de
extrema derecha contra su propio pueblo, como se puede conocer estudiando la
reciente historia.
El Gobierno de Zelensky es la
continuación de un proceso contrarrevolucionario que se impuso tras las
movilizaciones conocidas como el Euromaidán. Si bien esta lucha estalló por el justo rechazo del pueblo a la
corrupción sistémica en Ucrania, rápidamente la OTAN y EEUU se apoyaron en
sectores fascistas, herederos de colaboracionistas nazis como Stepan Bandera,
para convertirlo en una contrarrevolución reaccionaria.
La injerencia imperialista occidental ha
sido tan agresiva en el último periodo por la situación estratégica de Ucrania.
Además de ser una lanzadera perfecta hacia posiciones rusas, es un país con un
alto componente industrial, minero y agrícola, siendo incluso llamado “el
granero del mundo”
Según historiadores reconocidos
(a*): ““El Euromaidán es el nombre dado
a una serie de manifestaciones y disturbios heterogéneos de índole europeísta y
nacionalista de Ucrania que en su punto álgido derrocaron al presidente Viktor
Yanukovich, líder de la formación política pro/rusa, Partido de las Regiones.
Los sucesos se desencadenaron en Kiev la noche del 21 de noviembre de 2013, un
día después de que el Gobierno de Ucrania hubiera suspendido in extremis la
firma del Acuerdo de Asociación y el Acuerdo de Libre Comercio con la Unión
Europea”.
“Desde el 21 de noviembre, se producen
en Kiev varias concentraciones por la Independencia exigiendo al gobierno
retomar el diálogo con la U.E. La concentración aglomeró a cientos de miles de
personas en todas las inmediaciones de la plaza, con discursos diarios de
líderes políticos opositores así como iconos culturales ucranianos y
extranjeros que venían en señal de motivación y apoyo. Entre los principales gestores se encontraban
organizaciones sociales, la oposición política (incluido el grupo
ultra-nacionalista y de extrema derecha SECTOR DERECHO, uno de los principales
organizadores del movimiento en Kiev e instigador de los disturbios, y el
Partido Parlamentario, de Extrema Derecha SVOBODA) y las Iglesias ucranianas como la Iglesia
ortodoxa ucraniana del Patriarcado de Moscú”.(b*)
Las terribles consecuencias de tantos
meses de combates, están siendo devastadoras para la población de Ucrania, con
cientos de miles de muertos y millones de refugiados fuera de sus fronteras,
con cerca de diez millones de desplazados internos, ciudades e infraestructuras
enteras destruidas, un derrumbe del Producto Interior Bruto de más de un 50 %,
mientras que a los imperialistas Rusos y de la OTAN les importa poco esta
hecatombe porque su objetivo es el Beneficio de sus Multinacionales, sobre todo
del Complejo Militar Industrial USA que es quién domina las operaciones.
Datos del F.M.I. estiman que el Gobierno
de Zelenski necesita más de 4.600 millones de dólares al mes para sostener la
guerra y el apoyo que están teniendo, tal como ocurrió en Afganistán, está
sirviendo para llenar las arcas con beneficios astronómicos de una red de
intermediarios, contratistas, traficantes y mafiosos, relacionados con la compra/venta de armas a un nivel general, mientras la población
sigue sufriendo una agónica pesadilla, que padecerán, incluso cuando termine la
guerra con los difíciles años de la
reconstrucción.
La invasión de Rusia en Ucrania ha
esparcido un resentimiento profundo entre las poblaciones rusas y ucranianas
que antes eran incluso familias entrecruzadas y el odio creado que será difícil
de superar durante varios decenios, mientras Zelensky sigue preparando el
terreno, lanzando una batería de leyes contra la clase trabajadora. Ha
arrebatado a los sindicatos la capacidad de representar a los trabajadores en
las empresas, tanto estatales como privadas, introduciendo una “forma legal de
suspensión de empleo”, lo cual significa que, el trabajador no es despedido
formalmente, pero quedan suspendidos de los salarios y del trabajo y además,
otorga a los capitalistas el derecho a despedir unilateralmente con unas
ridículas indemnizaciones, suspendiendo los convenios colectivos.
En realidad, la invasión de Ucrania, que
la venimos condenando desde Izquierda Socialista de Málaga desde el inicio,
considerándola como ilegal e injusta desde el primer día, no es un
levantamiento de un país colonial, ni tampoco un caso de llamamiento de auxilio
de autodefensa de un régimen obrero que lucha por su emancipación, como sería
el caso de petición de Auxilio para
ejercer el Derecho de Libre Autodeterminación de un régimen democrático que
lucha por su liberación y reclama como pueblo el Derecho a votar libremente o
quiere aliarse con quién libremente decidan mediante el voto directo de su
población, que eso sí sería la mejor salida legítima y no la carnicería y el
destrozo que están llevando a cabo por la disputa inter/imperialista entre
Rusia y la OTAN.
¡¡NI
PUTIN, NI OTAN, NI GUERRAS¡¡
¡¡ALTO
EL FUEGO Y A NEGOCIAR ¡¡
¡¡POR
UN REFERÉNDUM DEMOCRÁTICO PARA RESOLVER EL CONFLICTO¡¡
¡¡SOLO
EL PUEBLO PODRÁ SALVAR AL PUEBLO¡¡
COMISIÒN PERMANENTE.
IZQUIERDA
SOCIALISTA MÁLAGA.
PSOE
ANDALUCIA.
(1) Fuente:
Euromaidán-Wikipedia, (a*) párrafo 1) y
(b*) párrafo 4).
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