20 de octubre de 2021

ECOLOGÍA: CUMBRES SOBRE “CAMBIO CLIMÁTICO”. VAN DE FRACASO EN FRACASO, MIENTRAS AL PLANETA TIERRA LO ESTÁN MATANDO. (Parte 1 de 2)

 

 Aquella famosa cumbre sobre el cambio climático de Naciones Unidas, celebrada en Durban (Sudáfrica), en diciembre de 2011, van ya para 10 años, puso de manifiesto la disposición de las potencias imperialistas que dominan la economía, para dejar claro,  que los intereses del sector de los combustibles fósiles marquen la agenda climática a favor de los intereses de unos pocos, anteponiendo el lucro privado de las multinacionales de la Energía, al bienestar de la población, por lo que se demostró una vez más,  a favor de qué clase están los representantes de ese obsoleto y pro-burgués organismo que es la ONU que defiende y ampara al sistema Imperialista/Capitalista y sus multinacionales.

Los ecologistas, los socialistas, los ecosocialistas y muchos progresistas en general, hemos condenado y condenamos desde hace muchos años, que las presiones de las multinacionales de la energía, sobre todo las petroleras, sigan controlando a los gobiernos para favorecer al sector de los combustibles fósiles y a las industrias más contaminantes, sin comprometerse a cumplir con la demanda que dice: “el que contamina paga”, negándose a asumir los presupuestos suficientes para contrarrestar los efectos nocivos de la contaminación que por sus ansias de beneficios, producen esas compañías depredadoras del planeta Tierra que ponen en peligro a la población mundial.  

Esta es una nueva muestra de que el capitalismo antepone los intereses de una minoría de archicapitalistas,  al peligro que representan los efectos del cambio climático que producen una creciente contaminación, envenenando la atmósfera que mata a miles de personas.

Greenpeace y demás organizaciones ecologistas, vienen criticando duramente los incumplimientos de las Cumbres, las cuales han descrito como un fracaso tras otro, a la vez que aseguran que los gobiernos que participan en ella deberían “sentirse avergonzados”.

Hace ya doce años, en diciembre de 2009 tuvo lugar la Cumbre sobre el Clima en Copenhague, que podemos decir claramente que fue igualmente otro fracaso rotundo más, pues los países ricos no quieren contribuir con recursos económicos suficientes, para resolver el problema, descargando sus consecuencias en los países empobrecidos, lo que pone todavía más difícil avanzar en las posibilidades de contrarrestar las consecuencias del cambio climático, que se viene detectando desde hace decenios.

Desde Izquierda Socialista de Málaga, venimos condenando en nuestros escritos y documentos (*)  esa situación cuando decíamos… “La represión policial en la Cumbre de Copenhague  ha sido muy dura, lo que demuestra el miedo de la clase dominante a que el movimiento de protesta se extienda a través de todo el planeta.

Desde el mes de octubre ya se detectaba una riada humana de activistas que llegaban a Dinamarca. Se calcula que los asistentes pasaron de 45.000, cuando la capacidad de plazas era solamente de entre 15 y 17.000 para estar bien instalados. Un desastre organizativo colosal.

Las manifestaciones de protesta fueron constantes, siendo una de las más numerosas la de 100.000 personas, activistas y ciudadanos, que protestaban en contra de que el capitalismo destruya el planeta. La represión contra los activistas de la marcha, lo mismo que contra cualquier manifestación de protesta ha sido vista por las televisiones de todo el mundo.

Aquellos que pensaban que Dinamarca era un país pacífico, amable, de una sociedad armoniosa e igualitaria, empezaron a cambiar de opinión cuando observaron las escenas donde cientos de miles de activistas sociales que luchaban pacíficamente por el derecho a la supervivencia de la especie humana sobre el planeta, habían sido tratados como animales salvajes.

La policía ejecutó unos 133 “arrestos preventivos” de activistas entre los días 11 y 13 de diciembre, de los cuales, solamente 4 de ellos fueron acusados con cargos, poniendo al resto en libertad “sin cargos”, lo que demuestra que habían sido “detenciones arbitrarias de activistas que protestaban pacíficamente”. 

Eran medidas policiales ordenadas por el Estado con el propósito de meter miedo entre la juventud contestataria y la clase trabajadora en lucha con el objetivo de amedrentar y dar un escarmiento para que se sometan y acepten los ataques contra los niveles de vida y del Medio Ambiente que se están preparando, haciendo ostentación por parte de la clase dominante de la “fortaleza de sus métodos represivos policíacos” al servicio de los intereses capitalistas y no de la “democracia” que supuestamente defienden.

Incluso la policía recibió órdenes de distribuir información en los Institutos de estudiantes de Copenhague, avisándoles que no debían participar en las manifestaciones contra la Cumbre.

Se ha visto claramente la campaña sistemática de sabotaje por parte de ciertos estados más potentes, que están promovidos y conducidos por las indicaciones e intereses de las grandes multinacionales energéticas, que defienden el injusto sistema capitalista de negociaciones por “imposición de sus criterios”, con métodos oscuros de presiones de las potencias dominantes.

“El acuerdo, de carácter no vinculante, está muy lejos de las expectativas generadas en torno a la mayor reunión sobre cambio climático de la historia y no fija objetivos de reducción de gases”, según informa El País.com (18-12-09). “Sin embargo, sí establece un total de 10.000 millones de dólares entre 2010 y 2012 para que los países más vulnerables afronten los efectos del cambio climático y 100.000 millones anuales a partir de 2020 para mitigación y adaptación”. (Cuando las necesidades mínimas se cifran en 50.000 millones de dólares al año, según las conclusiones del equipo de economistas que indicamos anteriormente.- “nota del autor”). Sigue informando el citado medio que: “el pleno quedó suspendido después de que 5 de los 193 países presentes en la conferencia anunciaran su rechazo a adoptar el leve acuerdo pactado entre 28 jefes de Estado y de Gobierno de países de todos los bloques presentes en la Cumbre del Clima”. (…) “

“Cuando después de horas de estéril debate parecía que el pacto se incorporaría como nota alternativa al acuerdo, el ministro británico de Cambio Climático, Ed Miliband, pidió que fuera una decisión vinculante. Sólo cinco países, entre ellos Venezuela, Bolivia, Cuba, Nicaragua y Sudán, se opusieron. Los presidentes de Venezuela y Bolivia ya anunciaron antes de conocer el texto que votarían en contra.

La representante de Venezuela aseguró que no iban a "vender su voto por 30.000 millones de dólares", la cantidad fijada como fondo para los países pobres durante los próximos tres años.

Sudán, un país que participó en la elaboración del texto, también criticó el acuerdo, pero fue desacreditado por la inmensa mayoría de países africanos. Quien no pidió la palabra fue China, cuyo primer ministro, Wen Jiabao, fraguó el acuerdo con Obama. Sin embargo, no lo defendió en el pleno y sus delegados llegaron a aplaudir las intervenciones críticas con el texto”.

“A efectos prácticos, la rebaja del texto tiene el principal inconveniente de que será difícil poner en marcha los 10.000 millones de dólares anuales a partir de 2010 que acordaron 30 jefes de Estado (incluyendo la UE como uno de ellos) que suman más del el 90% de las emisiones no dependía de la forma que tuviera. "Si lo quieren, bien. Pero en este acuerdo está todo el que emite. Si el pleno no lo acepta seguirá adelante", declaró antes de la reunión uno de los delegados de los países firmantes, como EEUU, la UE, China, Rusia, México, Noruega, Japón, Canadá, Brasil, Sudáfrica, Sudán, Leshoto, Etiopía...

Muchos de estos países, como Leshoto, Etiopía, Maldivas o Granada estaban en representación de grupos más amplios de países”.
  

“Miliband pidió convertirlo en una decisión de la convención, lo que le daba más valor. "Tenemos dos caminos: o asumir este texto imperfecto pero preparado con buena fe o romper esta convención", en relación a que si la reunión de Naciones Unidas rechazaba ese texto los países que lo habían acordado seguirían adelante por su cuenta y esto acabaría con la convención que desde 1992 bajo Naciones Unidas organiza la lucha contra el cambio climático”.

“Cuando el primer ministro danés Lars Okke Rasmussen, preguntó quién se oponía solo cuatro países pidieron la palabra, según afirmó el presidente.

Venezuela, Bolivia y Cuba criticaron que el proceso de selección de los países había sido poco democrático. Lo curioso es que el delegado de Bolivia, cuya capital está a más de 3.000 metros, insistía en que lo hacía para proteger a los pequeños estados isla, que sí aceptaron el texto”.

“Tuvalu consideró que la forma en la que se gestó el texto, "es una falta de respeto a los procesos de la Convención. Otros países tienen más respeto por los procesos democráticos", en alusión a EEUU pero finalmente se sumó al consenso, según fuentes del pleno, cerrado a la prensa y ONG.

Así, el eterno pleno se convirtió en una ristra de intervenciones a favor del acuerdo para evidenciar la soledad de los países que se oponen al texto. Países en desarrollo como Maldivas pidieron a Venezuela y Bolivia que permitieran que entrara en vigor el acuerdo”, según la información de la fuente de “El País.com” citada.

Este esperpéntico espectáculo ofrecido, demuestra el método de la “Dictadura del Capital”, imponiendo sus criterios por encima de cualquier método de debate democrático con los 193 países convocados, segando los diálogos que han sido antidemocráticos, además de una organización calamitosa, tanto en el exterior como en el interior.

Escándalos, peleas y altercados que son absolutamente inútiles e improcedentes, lo que expresa el resultado de esa quincena caótica y vergonzosa para la humanidad vivida en Copenhague que culminó en un fracaso total, tanto en los aspectos organizativos como de resultados concretos a los que hay que sumar unos niveles de represión nunca vistos en un país como Dinamarca, que era considerado hasta ahora como de los más civilizados de la vieja Europa.

Las tenues esperanzas que se habían generado en el nuevo presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, empezaron a desvanecerse como los hielos glaciares cuyos enormes “Icebergs” navegan a la deriva por los inmensos mares, al igual que el bochornoso papel jugado por la Unión Europea, que en un intento vano de liderar las negociaciones, ha producido más “contaminación social” que una vieja locomotora de carbón, elevando la temperatura de rechazo social en todo el planeta muy por encima de la alcanzada por la civilización humana en cualquier otra época de relativa paz social…/…

(Continuará mañana con la Parte 2 final)

 

EQUIPO DE COMUNICACIÓN.

IZQUIERDA SOCIALISTA DE MÁLAGA.

PSOE DE ANDALUCIA.


(*) Extracto de la Revista:  “CAMBIO CLIMÁTICO: ECOLOGÍA Y MEDIO AMBIENTE”,  de Izquierda Socialista de Málaga-PSOE,  que fue presentada, debatida y aprobada en la II Conferencia de Andalucía celebrada en Torremolinos, editada en el año 2010.

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